Peru Election 2006

APRA proposed a social front without success in June 2004. The proposal has been resurrected as a potential campaign strategy for the second round.
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Alan García delinea estrategia para segunda vuelta. APRA relanzará su “Frente Social”
Expreso, 25 de abril del 2006
El APRA relanzará el Frente Social con el fin de encarar la siguiente ronda electoral una vez conocidos los resultados de la primera vuelta, así como no formará una alianza con Unidad Nacional para impedir que el líder nacionalista Ollanta Humala gane las elecciones presidenciales, afirmó el líder aprista Alan García.
“En estos días se va a relanzar el propósito del Frente Social para pasar a labores concretas y asignar a personalidades, roles y responsabilidades en la conducción de cada uno de los planes que tiene el Partido Aprista Peruano para el empleo y el desarrollo”, declaró.
En ese sentido adelantó que se efectuarán reuniones con instituciones y reuniones de conjunto con técnicos y personalidades para fortalecer el Frente Social que convocará desde las organizaciones empresariales hasta las campesinas, con las cuales discutirán el plan de gobierno aprista.
Manifestó que, de ganar las elecciones, encabezará “un gobierno amplio y antisectario, en el sentido de convocar a la mayor cantidad posible de peruanos, de técnicos, de dirigentes de organizaciones sociales, para tener un gobierno nacional y no simplemente aprista”.
Momentos después, el líder aprista rechazó la propuesta del escritor Mario Vargas Llosa para crear una alianza con Unidad Nacional y otros partidos a fin de impedir que Humala llegue al poder.
Consultado sobre lo afirmado por el ex vocero de UPP, Daniel Abugattás, quien llamó a García el nuevo candidato de los ricos, el líder aprista contestó que esa declaración le parece una tomadura de pelo, pues en el interior del APRA “no tienen representantes de grupos de poder o vendedores de helicópteros”.
“Los ex candidatos del antisistema que ahora buscan vincularse al sistema pidiendo a gritos reuniones con la Confiep o con los propietarios de medios de comunicación, deberían preguntarse por qué ahora buscan congraciarse con aquellos a quienes amenazaron con la nacionalización y estatización. Ahora todo da una voltereta, cosa que es propia de quienes no tienen una organización de partido”, comentó.
De otro lado, invitó a su contendor a debatir tantas veces como sea necesario y conminó a Ollanta Humala a estudiar para debatir. “Si el partido va a la segunda vuelta, el candidato aprista tiene que debatir con el nacionalista una, cinco o diez veces, no se puede escabullir en decir que debatan otros. Hay un deseo de no debatir ahora. Si no quiere, yo le planteo un debate con su jefe político, Hugo Chávez”.
Alan García descarta ser el candidato de los ricos y dice que expresiones de Evo son “afiebradas”. El APRA relanza Frente Social y busca votos
La Primera, 25 de abril del 2006
Rechazo. El líder aprista rechazó la propuesta del escritor Mario Vargas Llosa para crear un frente anti-Humala con Unidad Nacional y otros partidos a fin de impedir que Ollanta llegue al poder.
A pesar de que en un primer intento el Frente Social no funcionó, el APRA pretenderá revivirlo como una carta bajo la manga, con la esperanza de que esta vez le sirva para ganar los votos de los candidatos que se quedaron en el camino, y así poder llegar al sillón presidencial.
El anuncio de esta resurrección lo hizo el líder aprista, Alan García, quien señaló que su agrupación se reunirá con diferentes personalidades e instituciones después de que la ONPE dé los resultados al 100%.
“Pasaremos a reunir a las personalidades y a buscar en ellas protagonistas, actores y ejecutores del plan de gobierno que hemos presentado.
Habrá reuniones con instituciones y líderes sociales, con técnicos y personalidades para fortalecer el Frente, que es nuestro propósito”, sostuvo confiado García.
Partido maduro
El candidato aprista espera con esta propuesta demostrar que “el APRA será totalmente amplia y antisectaria. Con esto se verá lo que ha madurado y aprendido el partido”, enfatizó.
Por otro lado, descartó ser el nuevo candidato de los ricos, tal como lo aseguró el ex vocero del humalismo, Daniel Abugattas.
“Me parece que es una exageración, una tomadura de pelo de la persona que lo ha dicho; yo soy el candidato del pueblo”, afirmó.
Por otro lado, salió al frente de los ataques del presidente boliviano Evo Morales hacia nuestro Mandatario. Apuntó que sus declaraciones son “afiebradas” y precisó que esto es un error de uno de los “súbditos” de Hugo Chávez, entre los que se encontrarían Morales y “seguramente Humala”.
Analistas creen que será difícil que funcione el Frente
La Primera, 25 de abril del 2006
Observadores políticos desconfían de la nueva estrategia aprista. El analista político Martín Tanaka consideró que el reanimado Frente Social, impulsado otra vez por el líder del APRA, Alan García, sería “difícil que funcione” puesto que el país se encuentra muy fragmentado actualmente. Aunque, indicó, esto sería un buen gesto político.
Tanaka descartó que éste sea el llamado “frente anti-Humala” que propuso el escritor Mario Vargas Llosa en su columna Piedra de toque.
“El señor Alan García es consciente de que no puede plantear un frente anti-Humala ni antinada, puesto que esto sería perjudicial para él y para sus aspiraciones de llegar al sillón presidencial.
La población ve con malos ojos esta clase de cosas”, sostuvo el analista en conversación con este diario.
Señaló que ésta restablecida táctica la van a tener que usar ambos candidatos, y aparece por la necesidad de buscar un diálogo más cercano con la ciudadanía, las instituciones y los gremios empresariales y laborales.
“No llamen a políticos”
Por otro lado, advirtió que esta idea funcionará dependiendo de la forma como se plantee el Frente. Manifestó que tan sólo se debe hacer el llamado a las instituciones, gremios y grupos sociales, puesto que la cercanía de algún grupo o personaje político podría ser contraproducente.
Por su parte, el ex ministro del Interior Fernando Rospigliosi recalcó que la propuesta de Alan García ya había fracasado en su oportunidad y por eso dudaba que esta vez funcionara y colmara la expectativa aprista.
“Puede que esta vez la propuesta de García vaya a tener un poco más de audiencia, pero tampoco creo que vaya a ser una gran novedad en esta segunda vuelta, ni que vaya a cambiar el panorama electoral”, anotó.
Nacionalistas: “La idea va rumbo al fracaso”
La Primera, 25 de abril del 2006
Para Unión por el Perú (UPP), el Frente Social del APRA se dirigiría rumbo al fracaso si lo utiliza para arrinconar y atacar a su contendor en la segunda vuelta electoral, Ollanta Humala. Así lo afirmó el virtual congresista de UPP José Vega Antonio.
Señaló, además, que sería un gran error convertir el Frente Social en una coalición anti-Humala, tal como lo planteó el escritor Mario Vargas Llosa, donde se den la mano todas las fuerzas políticas contrarias al candidato nacionalista.
“Están en su legítimo derecho de elaborar su estrategia, eso lo respetamos (…), pero el pueblo castigará y sepultará políticamente al APRA si utiliza al Frente Social para pretender arrinconar a Ollanta Humala, porque ya está cansado de viejas coaliciones”, manifestó.
Consideró que el anuncio de García revela que se pretende “resucitar” una propuesta electoral que en su momento no tuvo éxito, con el fin de capitalizar la mayor cantidad de votos posibles en esta etapa electoral.
El dirigente de UPP sostuvo que en la segunda vuelta la población tendrá que escoger entre el “cambio”, que representa Ollanta Humala, y los sectores tradicionales, conservadores y continuistas, personalizados por García Pérez.
Vega Antonio remarcó que Alan García debe explicar a sus electores “esta alianza que se está dando en esta parte del proceso electoral”.
Un frente de Lima y Perú
Por Mirko Lauer
La República, 6 o 7X?? de marzo del 2005
La idea de frente social (que hoy manejan, cada uno con criterio propio, el Apra y el Partido Democrático Descentralista, y con otro nombre algunos otros partidos) ha sido entendida como una alianza con organizaciones no directamente políticas, que asimila a lo partidario organizaciones que en principio deberían mantenerse como integrantes de frentes gremiales.
Hay la sensación de que el concepto de frente social no despega porque el mapa de los medios -los comunicadores de la idea- es diferente del mapa de la política real. El de los medios no es realmente un mapa político, sino un mapa comercial: en términos generales los medios no tienen dinero para mover su curiosidad libremente por el territorio, y pocos recursos para mover su producto, cuando es impreso.
A la vez, con pocas excepciones, hay demasiado pocos medios reales, en el sentido de políticos, fuera de Lima, y esto deja una marca en la política local. La informaliza. La radicaliza. Le resta continuidad. Así, la mayor parte de la política del Perú es informal porque no hay un mapa capaz de abarcarla; es decir, que no se puede o no se quiere reconocer grandes áreas del territorio ciudadano.
No sólo no hay mapa. No hay mecanismos de inclusión que aseguren poder mantenerse sobre el mapa que pueda venir. Por ejemplo, si la expresión de ideas e intereses es una exigencia para la democracia, entonces la política fuera de la capital casi no cuenta con acceso a la prensa nacional, o incluso a prensa alguna. Súmese a esto que solo las confrontaciones violentas producen titulares en la capital.
Entonces un frente social, es decir, que siga líneas sociales, debe verse también como un acuerdo entre lo formal/nacional y lo informal/local. El canje es claro: votos por representación, votos por acceso, votos por atención, y así sucesivamente. Para ello, primero hay que identificar el terreno. ¿Quiénes están dispuestos y en capacidad de organizarse para una elección? ¿Quiénes han sobrevivido a la experiencia?
La mayoría de las agrupaciones fuera de Lima son casi exclusivamente una combinación de caudillo pragmático y masas radicales. No porque ese sea el espíritu profundo de las zonas, sino porque así son sus necesidades. La indiferencia de la política nacional rearcaíza la actividad en el interior, con los sectores más conservadores liderando a menudo la lucha contra el avance de la modernidad.
Un frente social debería diferenciarse de la idea colonizadora, que consiste en ganar espacio (votos) fuera de Lima. La idea del frente debería ser más bien unirse con lo que hay “allá afuera” o “allá adentro”. Pero para esto uno tiene que identificar, reconocer, conocer y valorar. Lo mismo vale para el regionalismo silvestre que maneja la idea utópica de un nosotros sin Lima.