Para mi el tono de Inca Garcilaso de la Vega en “Los comentarios reales” es muy interesante y humorístico para una obra literaria que provee mucho contexto histórico. Parece que Inca Garcilaso, como interlocutor entre sus dos culturas. a veces por una forma subversiva y a veces de una manera muy obvia está corrigiendo las suposiciones a menudo pomposas y eurocéntricas de los españoles.
La selección del subtítulo “Advertencias” como aviso de corrección de la historia real de las lenguas indígenas del imperio inca no estiveron como los españoles habían traducido y adoptado (Garcilaso de la Vega p. 17). Esto toma un tono defensivo pero sarcástico, en lo que él defiende el uso de la ortografía original de las palabras indígenas. El mismo tono sarcástico y poco enojado regresó más tarde en la lectura mientras hace una referencia displicente a la “deducción del nombre de Perú”. El escribe “Los cristianos entendieron conforme a su deseo, imaginando que el indio les había entendido y respondido a propósito, como si él y ellos hubieran hablado en castellano… llamaron Perú aquel riquísimo y grande Imperio, corrompiendo ambos nombres, como corrompen los españoles casi todos los vocablos que toman del lenguaje de los indios de aquella tierra…” (Garcilaso de la Vega p. 15-16, negrita añadido por énfasis). He seleccionado la cita que creo es la más directa para criticar a los españoles, poco en el sentido de Bartolomé de las Casas en la primera negrita, pero de un nivel más cotidiano y básico en el segundo que sugiere de una molestia por la ignorancia de los españoles. Los dos son criterios claros en sus propios ámbitos pero es esto tono que pervade el documento que parece exudar una especie de molestia y aburrimiento con las tonterías estúpidas de los españoles, aunque mucha de la violencia que cometieron no fue nada estúpida.
Muchas gracias, Kelly, por tu lectura tan cuidadosa de la obra del Inca Garcilaso. Tu énfasis en el humor y el tono sarcástico no solo es acertado sino también muy importante. Es cierto que a veces se tiende a hacer una interpretación muy seria de este texto, mientras que el autor inserta muchas anécdotas, burlas de los españoles, ironía y, como también mencionaste, cierta molestia y enfado ante la aparente incompetencia de los conquistadores. Gracias de nuevo por recordarnos este aspecto relevante que complementa nuestras discusiones.