Tres niveles de trama (y de análisis) 

He visto “También la lluvia” muchas veces en mis varias clases de español y mientras siempre me interesa el instrumento del trama de “la película entre la película” la reseña de Stephen Holden me obligó a considerar “la película entre la película entre la película”. Es decir, considerar el contexto de la creación de la película real y entera, la dirigida por española Icíar Bollaín. No soy la “policía de arte” y no me gustaría decir quien puede o no puede hacer arte pero me parece muy irónico que ella crea una obra con criterios válidos que también puede ponerse en contra de ella. Investigué un poco en esto y encontré este análisis de Kathryn Lehman sobre “Unlearning Colonial and Nation-State History in Documentary Film by and about Indigenous Peoples” e introduce la importancia de la agencia indígena. Lehrman dice que es evidente en “También la lluvia por sus representaciones de las protestas, el proceso de organización de la Coordinadora del defensor de Agua, y por el carácter de Daniel/Hatuey (Juan Carlos Aduviri). Sin embargo, también ver esta personificación es como acercarse al tropo de “noble salvaje”. Es importante notar los debates relevantes sobre el reemplazo de reparaciones/reconciliaciones activos por el aumento de “representación” y la importancia de la autorepresentación auténtica.

 

Estoy muy interesado en las opiniones de mis compañeros de clase sobre las decisiones de Bollaín. Piensas que ella pensó sobre la ironía de su obra como crítica del colonialismo histórico y contemporáneo? Dirías que esta película del nivel “real” (es decir la película que vimos) funciona como una cara del colonialismo contemporáneo?

La sensación de sueño en Cortázar y el cortometraje

También encontré “La noche de boca arriba” muy difícil de entender probablemente debido al estilo surrealista/de realismo mágico que me encanta pero requiere releer mucho. Mientras que puedo ceder que el cortometraje falta algunas de las complejidades y espacio para la imaginación de la lectora que el texto provee, el cortometraje me permite a entender más estas complejidades de trama y escenario.

Lo más importante para mi es la situación de “boca arriba” y que todo ocurre mientras que el protagonista está totalmente postrado. Mientras que obviamente sentí la confusión pretendida por el autor, he encontrado que la visualización de esto en el cortometraje para encapsular cómo el protagonista se mueve entre sueños y realidades desconocidas. El cortometraje llena mi entendimiento con una visualización mejor de esta transición y tan sacudiendo y aterrorizando podría ser. 

Por otro lado, mientras que el texto literario parece mucho más lento, podemos ver más de los pensamientos y emociones del protagonista. Encontré que mi comprensión de la trama se basaba más en estas descripciones largas y confusas que desdibujan la realidad y el sueño, haciendo que el narrador parezca mucho más inestable e inviable. Este entendimiento más matizada se pierde en el cortometraje, en lo que es claramente entendido como dividido. El sentido de “sueño” convertido en una realidad posible es mucho más prolongado y, por lo tanto, más experimentado por el lector.

La Malinche y identidad nacional

El fragmento de “Los hijos de La Malinche” de Octavio Paz me interesa mucho porque ofrece una conexión entre la figura polémica de la Malinche y la cultura mexicana moderna. El autor entrelaza críticas coloniales, ideas sobre la evolución y la complejidad de la identidad nacional, y los conecta con una análisis del uso de la palabra favorita, la chingada. Este fragmento, que viene de un capítulo de su libro El laberinto de soledad, pinta La Malinche como “la Madre violada” asociado con la conquista como víctima y perpetradora, secuestrada y seducida por los extranjeros (224). El nivel más alta de interpretación de Paz es más evidente en la línea que condena la denigración total de La Malinche en el ámbito social/nacional/popular:  “En ese grito condenamos nuestro origen y renegamos de nuestro hibridismo […] les revela que son algo más que figura históricas: son símbolos de un conflicto secreto, que aún no hemos resuelto” (225). Mientras esto libro-ensayo tiene más que treinta años y tiene su señales de su momento, lo provee una análisis de la cultura moderna mexicano muy matizada que incluye aspectos de las culturas indígenas, los impactos de la conquista violenta, la continuación del colonialismo, las religiones, los intentos reformistas, el machismo y el género, y como todos de estos aspectos impactan México y la identidad mexicana de hoy (o de 1985). 

Para mi, la cultura popular y las construcciones de identidades nacionales siempre son muy interesantes para analizar. Este fragmento de Paz, mientras muy intenso, ofrece una crítica profunda del legado de la época conquistadora y la colonización es su tesis del hombre en abstracción que “se vuelve hijo de la nada”, distinto del pasado de sus antepasados. Pero, en el caso de La Malinche, La Chingada, los legados siguen y impermea lo cotidiano.

El tono de Inca Garcilaso de la Vega

Para mi el tono de Inca Garcilaso de la Vega en “Los comentarios reales” es muy interesante y humorístico para una obra literaria que provee mucho contexto histórico. Parece que Inca Garcilaso, como interlocutor entre sus dos culturas. a veces por una forma subversiva y a veces de una manera muy obvia está corrigiendo las suposiciones a menudo pomposas y eurocéntricas de los españoles. 

La selección del subtítulo “Advertencias” como aviso de corrección de la historia real de las lenguas indígenas del imperio inca no estiveron como los españoles habían traducido y adoptado (Garcilaso de la Vega p. 17). Esto toma un tono defensivo pero sarcástico, en lo que él defiende el uso de la ortografía original de las palabras indígenas. El mismo tono sarcástico y poco enojado regresó más tarde en la lectura mientras hace una referencia displicente a la “deducción del nombre de Perú”. El escribe “Los cristianos entendieron conforme a su deseo, imaginando que el indio les había entendido y respondido a propósito, como si él y ellos hubieran hablado en castellano… llamaron Perú aquel riquísimo y grande Imperio, corrompiendo ambos nombres, como corrompen los españoles casi todos los vocablos que toman del lenguaje de los indios de aquella tierra…” (Garcilaso de la Vega p. 15-16, negrita añadido por énfasis). He seleccionado la cita que creo es la más directa para criticar a los españoles, poco en el sentido de Bartolomé de las Casas en la primera negrita, pero de un nivel más cotidiano y básico en el segundo que sugiere de una molestia por la ignorancia de los españoles. Los dos son criterios claros en sus propios ámbitos pero es esto tono que pervade el documento que parece exudar una especie de molestia y aburrimiento con las tonterías estúpidas de los españoles, aunque mucha de la violencia que cometieron no fue nada estúpida.

Week 1: Conexiones entre mitos y las generaciones

Mi primer paso por el Popol Vuh me dejó muy confundida; entendí que era una historia de creación, con los intentos fallidos y una violencia que no había visto en otros mitos de la misma categoría. Pasé demasiado tiempo preocupado con las similaridades entre esta historia y la biblia, con las referencias al “Creador” y el “Formador” (p. 14), el proceso de poblar la tierra con animales (p. 18), y la inundación para destruir los que se consideran incorrectos (p. 23). Como una lectora no familiarizada estaba buscando información conocida para llenar los puntos de malentendido. Afortunadamente después de un segundo paso, y la adición del video muy informativo, tengo un entendimiento más complejo de las temas centrales y la importancia cultural del Popul Vuh para los mayas que es independiente de mi interpretación inicial.

El tema central de estos capítulos es la importancia de valorar y respetar a los dioses con énfasis en las relaciones familiares. Como una obra cultural esto crea una conexión entre los dioses, los ancestros y las generaciones más jóvenes animándoles a honrar a los que les precedieron. La destrucción de las personas de madera y el nuevo destino de los animales dejan claro que los humanos son creados tal y como estos dioses querían, a pesar de los múltiples errores. La última amenaza sigue vigente; pensar en el Creador y el Formador, en su madre y su padre o ser castigado (p.24).