Servirle al rey – Trabajos del reino

Se me hace curiosa esta novela por su forma de presentar el tema de lo narco. El libro consiste de capítulos cortitos, sin referencia al número del capítulo ni llevan títulos. En comparación con los otros textos que hemos visto este semestre, lo presenta de una manera distinta, con un narrador que habla en la tercera persona, siguiendo a un artista quien se puede decir es el protagonista de la historia. El artista es nuestro informante que describe cómo es ‘el castillo’, lo que se ve y la estructura de aquel ‘reino’.

Si no me equivoco, no hay una mención de dónde ocurre la historia, solo se puede deducir que toma lugar en México por el léxico (por frases como “órale, órale cabrón, órale, póngase a chambear” (p.29). Pero sí hay mención de que esta asociación está llena de extranjeros con personajes como el gringo y la niña que habla con otro dialecto del español.

Los personajes no tienen nombres, sino apodos que en realidad son los roles que tienen dentro de este ‘reino’. Me recuerda a los apodos del libro de Juan Justino, como “el Teniente Castro” y a la misma Rosario Tijeras. Parece que a estos narcos no les gusta compartir sus nombres reales y siempre llevan apodos que describen su papel dentro de su grupo. En trabajos del reino, tenemos personajes como el heredero, el joyero y la bruja que de alguna manera se relacionan con el rey.

Lo que hace que presente lo narco diferente es este hecho de pintar la organización/el grupo de los narcos como un reino, con el capo como el rey intocable, al menos según el artista. El artista ve al rey con toda su grandeza y constantemente se esfuerza en impresionarlo ya que se siente protegido como uno de sus súbditos y lo ayudó a tener una mejor vida con un propósito. El rey le proporcionó con lo que nunca había tenido el artista, comida, ‘amigos’, estatus y una mujer. Por eso, el artista acepta su rol con orgullo y le echa muchas ganas empleándolo.

 

Castillo nuevo de Manzanares el Real - Wikipedia, la enciclopedia libre

En algunos momentos del libro, el lector puede pensar que está leyendo de un reino de verdad con un rey, su castillo y sus sirvientes. Solo falta la reina, ¿no?

Aquí les dejo con algunas preguntas interesantes:

Sin saber el contexto de los narcos, ¿se puede leer este libro como si hablara de un reino de verdad? Si no, ¿En qué momento se puede dar cuenta de que la historia se trata de los narcos?

¿En qué otras maneras creativas se pueden retratar lo narco?

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