Reflexión

Durante las últimas semanas hemos estudiado una serie de textos sobre la colonización y conquista de América por los españoles. Ha sido muy interesante para mí aprender más de este tema y conocer diferentes datos e historias viniendo de diferentes personas y perspectivas. Esto creo que es lo más importante para mí, porque el haber tenido la oportunidad de leer textos de cuatro autores tan distintos enriquece nuestro conocimiento en el tema y nos da una perspectiva más amplia.

Es cierto que los textos y autores tienen algunas cosas en común que hacen que quizá nuestra comprensión de los hechos sea parcial.   Todos los autores eran españoles o tenían ascendencia española con Garcilaso, lo cual me hace pensar sobre lo poco que sabemos sobre la perspectiva de la otra parte fundamental de estas historias: los indígenas, los colonizados. A pesar de esto, todos los autores narran sobre su experiencia sobre los indígenas, aunque dependiendo de quién escribiese veíamos más o menos comprensión y acercamiento hacia los nativos. Además, en mi opinión, hemos leído estos textos en un orden progresivo en función de cuánto nos dan a conocer sobre la perspectiva y forma de vida de los indígenas y cuánto se “empatiza” con ellos.

Primeramente leímos los textos de Colón, quien no mostraba ningún tipo de empatía con los indígenas y los mostraba como seres inferiores y sumisos a los españoles. Como hemos discutido previamente, esto seguramente lo hacía para dar una idea idealizada sobre ellos, ya que estas fueron las primeras percepciones que leían muchos españoles sobre “los indios”. A continuación leímos los textos de Cabeza de Vaca, quién a pesar de tener al principio ideas y prejuicios sobre los indígenas similares a Colón, muestra una progresión en su manera de pensar a lo largo de los textos. Cuanto más se acerca y más recurre a los indígenas, más conocimiento tiene sobre ellos y más simpatiza son su estilo de vida y costumbres, lo cual nos empieza a revelar más datos sobre los nativos más allá de lo poco que describió Colón. Las Casas directamente denuncia las atrocidades e injusticias que están cometiendo los españoles contra los indígenas, lo cual nos da una visión más clara y cruda de lo que sufrieron los nativos durante la colonización. Las Casas nos muestra un nivel de empatía y comprensión aún mayor que los otros dos autores. Finalmente leímos a Inca Garcilaso de la Vega, quién nos proporciona un factor muy importante: él es un inca nativo y conoce a las sociedades indígenas desde dentro como un miembro más. Esta perspectiva es muy enriquecedora ya que esta información sobre los nativos ya no son opiniones de un español, si no hechos y datos de alguien que provenía de esas tierras.

¿Opinan que cuantos más autores hemos leído más nos hemos acercado a la verdad sobre los indígenas? ¿Por qué?

2 thoughts on “Reflexión

  1. Hannah

    Hola,

    Me gusta mucho tu reflexión. Hay mucho que pensar con respecto a esta clase en particular. Con la verdad de las indígenas, no sé si nos acercaremos a ella. En otra clase hablábamos de que la principal forma de conocimiento de los pueblos era la verbal, las historias que transmitían de una generación a otra. Así es como ampliaban sus conocimientos. La escritura y la lectura era la perspectiva del pueblo español. Por eso creo que, por mucho intentemos y hagamos, nunca llegaremos a comprender del todo a los pueblos indígenas. Con esto, estaría bien que hubiera más textos escritos por mestizos o indígenas, pero, de nuevo, esto viene de mi visión occidental del conocimiento.

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  2. Gabrielle

    Generalmente, si leemos más, sabemos más, pero no creo que sepamos más de la verdad. En cambio, sabemos más de muchas verdades (las verdades tal como se definen/describen en cada uno de los textos). Cada autor tuvo una experiencia diferente, intereses diferentes y una perspectiva diferente, que dieron forma a lo que considerarían la verdad. La verdad histórica no es una verdad objetiva, es, creo yo, una serie de verdades subjetivas. Nunca podremos saber realmente qué sucedió en el pasado a menos que podamos construir una time machine y experiencarlo.

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