El Zahir

El Zahir se me hizo un cuento muy interesante porque Borges se refiere a Borges en el cuento; así que da la posibilidad de que sea él el personaje principal/narrador, o que sea otra persona que simplemente se refiere a este autor. En este cuento, se juega mucho con la inclusión del lector, por ejemplo, el narrador nos deja saber que estaba interesado en Teodelina Villar a través de una cita breve donde dice: “Quizá ya lo haya sospechado el lector” (121).  Entonces, todo el relato es interrogado por cuestiones como la anterior. Hay un momento donde me perdí porque el narrador comienza a decir que en esos días decidió escribir un cuento y me pareció que era Borges mismo explicándole al lector los pasos que se toman para escribir y terminar esta escritura. Por lo tanto, la voz de Borges me pareció muy presente en este cuento, obviamente está presente en todos sus cuentos, en fin, él es el autor; pero en este cuento más que en otros, Borges se involucra en la vida de sus personajes. Esto nos lleva a otra característica Borgeana que es que él escribe de una forma autobiográfica.
Pasando a otro tema interesante, y quizás el más interesante de este cuento, y que lleva su título, el simbolismo del Zahir. A continuación, citare los momentos claves de este cuento que dan (hasta cierto punto) la simbología de Zahir: “Pedí una caña de naranja; en el vuelto me dieron el Zahir; lo miré un instante; salí a la calle, tal vez con un principio de fiebre” (122); “(…) pedí una caña y la pague con el Zahir” (124); “(…) cuya imagen acaba por enloquecer a la gente” (127); “Ya no percibiré el universo, percibiré el Zahir” (131); “Otros sonaran que estoy loco y yo con el Zahir” (131); “Quizá yo acabe por gastar el Zahir a fuerza de pensarlo y de repensarlo, quizá detrás de la moneda esté Dios” (132). Entonces, en la primera cita, sabemos que este Zahir trae un misterio con el porqué su dueño desde luego, siente los síntomas de la fiebre. Esto establece que no se siente “normal” pero no sabe la razón, cuando de deshace de esta moneda, trata de no pensar en ella, pero se le hace imposible. Por lo tanto, sabemos que la moneda lo tiene poseído, cosa que se ejemplifica en la cita de la página 27, porque enloquece. En fin, este narrador protagónico (que puede ser Borges) termina alabando al Zahir y es la razón por la que vive; irónicamente también nos da la opción de que puede ser Dios. Por lo tanto, este Zahir representa una pieza de enloquecimiento y una entrega total del alma a algo material. Si lo conectamos con el materialismo de la vida, tal vez puede representar a todas las cosas materiales que la humanidad termina por alabar sobre cualquier otra cosa.

El Zahir

El Zahir se me hizo un cuento muy interesante porque Borges se refiere a Borges en el cuento; así que da la posibilidad de que sea él el personaje principal/narrador, o que sea otra persona que simplemente se refiere a este autor. En este cuento, se juega mucho con la inclusión del lector, por ejemplo, el narrador nos deja saber que estaba interesado en Teodelina Villar a través de una cita breve donde dice: “Quizá ya lo haya sospechado el lector” (121).  Entonces, todo el relato es interrogado por cuestiones como la anterior. Hay un momento donde me perdí porque el narrador comienza a decir que en esos días decidió escribir un cuento y me pareció que era Borges mismo explicándole al lector los pasos que se toman para escribir y terminar esta escritura. Por lo tanto, la voz de Borges me pareció muy presente en este cuento, obviamente está presente en todos sus cuentos, en fin, él es el autor; pero en este cuento más que en otros, Borges se involucra en la vida de sus personajes. Esto nos lleva a otra característica Borgeana que es que él escribe de una forma autobiográfica.
Pasando a otro tema interesante, y quizás el más interesante de este cuento, y que lleva su título, el simbolismo del Zahir. A continuación, citare los momentos claves de este cuento que dan (hasta cierto punto) la simbología de Zahir: “Pedí una caña de naranja; en el vuelto me dieron el Zahir; lo miré un instante; salí a la calle, tal vez con un principio de fiebre” (122); “(…) pedí una caña y la pague con el Zahir” (124); “(…) cuya imagen acaba por enloquecer a la gente” (127); “Ya no percibiré el universo, percibiré el Zahir” (131); “Otros sonaran que estoy loco y yo con el Zahir” (131); “Quizá yo acabe por gastar el Zahir a fuerza de pensarlo y de repensarlo, quizá detrás de la moneda esté Dios” (132). Entonces, en la primera cita, sabemos que este Zahir trae un misterio con el porqué su dueño desde luego, siente los síntomas de la fiebre. Esto establece que no se siente “normal” pero no sabe la razón, cuando de deshace de esta moneda, trata de no pensar en ella, pero se le hace imposible. Por lo tanto, sabemos que la moneda lo tiene poseído, cosa que se ejemplifica en la cita de la página 27, porque enloquece. En fin, este narrador protagónico (que puede ser Borges) termina alabando al Zahir y es la razón por la que vive; irónicamente también nos da la opción de que puede ser Dios. Por lo tanto, este Zahir representa una pieza de enloquecimiento y una entrega total del alma a algo material. Si lo conectamos con el materialismo de la vida, tal vez puede representar a todas las cosas materiales que la humanidad termina por alabar sobre cualquier otra cosa.

Del Infinito y otros terrores…

Hablaré del cuento ‘El Inmortal’….En este
cuento los temas son: laberinto-infinito-inmortalidad…los cuales vistos desde
un punto de vista filosófico, serian como tres caras de una misma moneda, si la
moneda tuviera tres caras…Nuestro hombre Rufo es un soldado romano que se
aventura a encontrar la fuente de la vida eterna y lo que encuentra es
aterrador, es decir, encuentra el Infinito, pero no es posible ver el Infinito sin volverse loco o morir…Entonces, hay de terrores a terrores, es decir, el mismo concepto de Laberinto es aterrador por sí mismo,
pero es un terror humano, y es más bien sugerente del Misterio, de lo Sagrado…al
menos podemos perdernos en él, tratando de llegar al Centro…es decir, una cosa
es ver las sombras, los trazos nebulosos del Misterio y otra muy distinta es mirar
al Misterio frente a frente. Cuando esto sucede, ver el Misterio, uno ya ‘no
puede ser el mismo de antes’ como sucede en el relato ‘El Espejo de Tinta’
cuando el Rey Doliente se ve a sí mismo detrás de la Máscara…entonces se
convierte en Mendigo, no puede seguir siendo rey…es claro que Rufo no puede, no pudo contemplar esa Ciudad de los Inmortales por mucho tiempo,
esa ciudad de ‘dioses irracionales’, pues corría el riesgo de perderse a sí
mismo…lo curioso es que después se perderá a si mismo inevitablemente…

Entonces, hay dos terrores: uno es hermoso y otro
sublime-metafisico, como argüían Kant y Burke…La Belleza Sublime es Aterradora;  es lo que sentimos cuando estamos frente a algo que nos avasalla, que nos hace
sentirnos pequeñitos pequeñitos, insignificantes, como cuando sentimos el peso
del universo en nuestras espaldas…pero sin ser tan fuertes como Atlas…este es
el terror de nuestro amigo Rufo-Odiseo…no pudo soportar esas imágenes infinitas, esas escaleras al revés…los
hombres (y mujeres) no estamos preparados para tales angustias ontológicas…entonces
Rufo regresó por donde había llegado a este bestial lugar, es decir, por el
laberinto de puertas y pasadizos…y encontró al troglodita, que era en realidad
él mismo…es decir, Rufo ya era inmortal desde que hubo bebido de la fuente de
agua oscura…y ya empezaba a sentir los efectos del tiempo o más bien de la
Eternidad…el Troglodita es él mismo, y es también Homero, y también Ulises…todos
y nadie…es decir, en las infinitas posibilidades laberinticas del Universo-del Tiempo y del
Espacio, yo seré Homero algún día (o ya fui tal vez)…y Homero será yo…y yo seré todos pero también
nadie, por ser todos…seré una contradicción de mi mismo, me negaré a mi mismo
al ser Da Vinci, Jesucristo, Moctezuma  y
Dalí…pero también me validaré a mí mismo, infinitamente, atemporalmente, en
esos laberínticos jardines que se bifurcan hacia la eternidad…

Tlön

Tlön, Uqbar…

En este relato hay muchos temas a tratar, está
por ejemplo, La Realidad, El Poder de la Escritura y La Lectura…Berkeley, El
Doble, EL Tiempo y El Espacio, entre otros… A mí me interesa hablar de la
Realidad-Mundo más que nada, aunque probablemente toque otros temas de forma
secundaria…

Este cuento largo (para Borges) nos habla del
poder de la escritura-lectura, desde un punto de vista metafísico…es decir, se
trata de una creación (o varias) que sigue un proceso claro en la historia, es
como ir viendo el crecimiento de algún ser frente a nosotros, en este caso,
vimos crecer primero a La Sociedad Secreta Orbis, después vimos crecer a Uqbar
y por último a Tlön, a tal grado de que Tlön ya se empezaba a tragar nuestra propia realidad…¿Cómo sucedió esto? Bueno, pues sucedió a través de la escritura primero
(el articulo de enciclopedia, el tomo once) y después a través de la lectura-interpretación
que hace el Propio-Narrador-Borges…es decir, al estar contándonos estas
aventuras fantásticas, una nueva realidad cobra vida, y ¿porqué sucede esto?
Pues porque eso es lo que piensa Berkeley, quien dice que ‘percibir es existir’…entonces,
el verdadero autor de estas realidades no es la sociedad secreta ni el
millonario de Tennessee, etc., sino el propio narrador, puesto que Uqbar y Tlön sólo existen en la medida en que alguien los piense…como ya mencioné líneas
arriba, esta Realidad-Tlön acaba por
contaminar nuestra realidad al empezar a verse objetos pertenecientes a este
planeta en cuestión y en general ya se sientes cambios muy importantes en
nuestro ‘mundo’ como que ‘nuestro pasado ya cambió ’ o que se estudia el idioma
de Tlön, etc. Ese mundo Tloniano ya es nuestro mundo…y el español va
desaparecer junto con él….


La EnCICLOpedia o La arqueología fantástica: Tlon, Uqbar, Orbis Tertius

En Tlon, Uqbar, Orbis Tertius se comienza nuevamente con el tema de los reflejos mediante las transcripciones, las traducciones y las reimpresiones como una “transformación” o “transmutación” de las posibilidades o los avatares de la “información”, tema que es constante desde Inquisiciones y parece recorre y ocupa un lugar preponderante en la producción prosística borgeana. Dicha información pareciese fruto de una tarea arqueológica-fantástica con fines de un placer excéntrico. Así mismo, me llama la atención que dicha información se encuentre localizado principalmente en Nueva York, Inglaterra y Alemania. Por otro lado, destaca el pastiche que recuerda desde el artículo enciclopédico, el cuento fantástico y el confesionalismo del diario personal. Llama la atención a su vez lo casual, inmotivado y poco sistemático del “origen” sobre la controversia de la sentencia “los espejos y la cópula son abominables, porque multiplican el número de los hombres”.  De dicha frase se desprende necesariamente un tono misántropo ante la reproducción en todas sus manifestaciones. Sin embargo, a su vez se transparentan los principales (supuestos) logros de la Humanidad (o del hombre como género y no como especie): la filosofía europea, la matemáticas, la geometría, la lingüística, etc. Es decir, el Saber (que sugiere una especie de historia fantástica) parece estar “desprendido” del “sujeto”… Además hay que señalar que dicha frase se presupone dicha por un heresiarca que en sí mismo ya es un distanciamiento, cuestionamiento, traducción, reproducción, transmutación, negación, cuestionamiento, etc., de un pensamiento oficial, una herejía o una literatura fantástica…

Esta narración me recordaba un poco mis lecturas de Literatura Hermética. Todo el Corpus Hermeticus  tiene un tono tlonuqbaresco mezcla de todo y a la vez nada, o mejor dicho la Enciclopedia de Tlon podría formar parte de la Literatura Hermética, o la Literatura Hermética es la semilla de la Fantástica o toda Literatura es fantástica, no lo sé…

La simple idea de “enciclopedia ya genera por sí misma el vértigo borgeano. Por un lado la pretensión circular de un saber total principalmente científico y cultural que autentifica el valor de los logros de la Humanidad como instrumento de la razón. Una obra en colectivo donde el autor desaparece y la información es una especie ente independiente. De posibilidades infinitas. Salta de un tema al otro sin ninguna transición (aparente). Atemporal. Instrumento de legitimización de lo real… en otras palabra Borges.


Pierre Menard, autor del Quijote


Uno de los cuentos que más me interesó, dentro de unos cuantos en Ficciones,  es “Pierre Menard, autor del Quijote”.  En este cuento nacen preguntas interesantes sobre la autoría, la apropiación, la interpretación, el escritor y el lector.

¿Cómo puede el narrador insistir que la versión de Don Quijote escrita por Mendard es ¨casi infinitamente más rica¨ cuando las dos versiones, la de Cervantes y la de Menard, son, palabra por palabra, idénticas? 

Olvidarnos de todos los cambios y acontecimientos que han occurido desde que Cervantes  escribió Don Quijote y volver a una forma medieval de ver el mundo es imposible.  Es imposible "olvidar la historia de Europa entre los años de 1602 y 1918¨.  El narrador (que en este caso también asume el papel de lector) lee la version de Quijote escrita por Menard dentro del contexto de Menard.  Don Quijote es interpretado como una respuesta de Menard sobre la época, los eventos históricos, sociales, literarios en el cual él vivía. Y así las palabras toman otro significado para el lector. 

Más alla del contexto del autor, la palabras idénticas pueden tomar otro significado porque el lector también trae a la lectura sus propias expectativas,  preconcepciones y contexto.  Se puede arguir que no hay una interpretación verdadera o autentica de un texto. En principio es imposible identificarse por completo con el autor.  Y un texto puede tener multiples posibilidades de interpretación, cada un como efecto de contexto y de intertextualidad. 

Sobre los cuentos que aparecen en Etcétera en La historia universal de la infamia, Borges dice en el prólogo que "él no tiene otro derecho sobre ellos que los de traductor y lector.¨  El método que adopta Menard en su versión de Quijote nos dice algo, y hasta se puede interpretar como una justificación, del método que Borges adopta en su propia escritura.

¿Y no es verdad que vamos a leer “La cámara de las estatuas¨ (Del Libro de las 1001 Noches) de otra forma sabiendo que fue “escrito” por Borges, hasta si sólo, como él dice, en función de traductor?  ¿No lo vamos a leer con toda la expectativa que implica leer a Borges?  Lo mismo podemos decir sobre los otros cuentos en La historia universal de la infamia, que también fueron apropriados por Borges de alguna forma.    

¿Puede existir un texto en su estado original o es algo que necesariamente va cambiando, que se va transformando con tiempo, contexto, intertextualidad, de escritor a escritor, de lector a lector?  En este sentido, ¿se puede decir que el texto tiene vida en si?  ¿Qué el texto existe más alla e independiente del escritor y del lector?

I have a dream…

Este es uno de los mejores relatos en la obra Borgeana…se trata de muchas cosas, pero me interesan tres: el sueño, la naturaleza humana y el circulo… El sueño es creador, a diferencia del cuento Tlön, Uqbar, donde el Lenguaje es el creador…la vigilia es improductiva, es cuando el Hombre-Mago no puede producir o continuar su creación…su hijo…finalmente cae dormido y es cuando sueña el corazón…sin embargo no puede darle forma-vida…y llama al Fuego para darle el soplo divino… El hombre-mago no sabe quién es hasta el final, donde se da cuenta que es un sueño, entonces se entiende que el ser humano no sabe de dónde viene ni a donde va…o bien, que sólo somos fantasmas…sueños de otros…y la vida misma es sueño…lo demás son sólo RUINAS-VIGILIA… El circulo simboliza el eterno retorno…repetición sin fin, sueño eterno…no hay más que sueños y éstos llevan a otros sueños, todos se entrelazan y en realidad no se sabe quién está soñando a quién en esta cadena infinita de sueños…tal vez hay un Soñador Absoluto..


Ficciones- JLB

Lo que me viene a la mente cuando leo este libro es que podemos ver "Ficciones" como una representación de la cuentística Borgeana. Es decir, hay muchas referencias y alusiones a sus ídolos e influencias literarias, lo que nos hace entender su perspectiva general hacía sus cuentos y estilo. Horacio Quiroga nos dice en su Decálogo del perfecto cuentista: "Cree en un maestro - Poe, Maupassant, Kipling, Chejov- como en Dios mismo." (http://www.ciudadseva.com/textos/teoria/opin/quiroga1.htm). Entonces, cada escritor tiene sus propias influencias y el estilo nunca es completamente original.

En el caso de Borges, sabemos que a él le gustaba leer a escritores como Stevenson (escribió Strange Case of Dr. Jekyll and Mr. Hyde), lo que podemos vincular con el cuento "El jardín de senderos que se bifurcan" que Borges mismo declara como 'policial' es su prólogo. Además, hay los elementos fantásticos como en "El Sur" (el murciélago y el envenenamiento de la sangre) que podemos vincular con Quiroga mismo y el género de lo vampiresco en general. Por otra parte, Borges explica todas las secciones de este libro en su prólogo y vincula cada sección con un género o escritor ya establecido.

Por eso quiere citar a algunas frases de Tlön, Uqbar, Orbis Teritus que me parecen muy apropiados. Hablando de los libros en el mundo creado de Tlön, el autor nos dice que: "En los hábitos literarios también es todopoderosa la idea de un sujeto único. Es raro que los libros estén firmados. No existe el concepto del plagio: se ha establecido que todas las obras son obra de un solo autor, que es intemporal y es anónimo" (32). 

No solamente podemos vincular esa idea con el ensayo de Roland Barthes, "The Death of the Author", pero también podemos aplicarlo a la idea que propone Quiroga- siempre hay un precursor. Entonces, cada vez que Borges alude a un escritor, género o libro, está expandiendo el gran corpus de literatura y establece un vínculo entre muchos autores en un sólo cuento, una sola expresión.


Ficciones- JLB

Lo que me viene a la mente cuando leo este libro es que podemos ver "Ficciones" como una representación de la cuentística Borgeana. Es decir, hay muchas referencias y alusiones a sus ídolos e influencias literarias, lo que nos hace entender su perspectiva general hacía sus cuentos y estilo. Horacio Quiroga nos dice en su Decálogo del perfecto cuentista: "Cree en un maestro - Poe, Maupassant, Kipling, Chejov- como en Dios mismo." (http://www.ciudadseva.com/textos/teoria/opin/quiroga1.htm). Entonces, cada escritor tiene sus propias influencias y el estilo nunca es completamente original.

En el caso de Borges, sabemos que a él le gustaba leer a escritores como Stevenson (escribió Strange Case of Dr. Jekyll and Mr. Hyde), lo que podemos vincular con el cuento "El jardín de senderos que se bifurcan" que Borges mismo declara como 'policial' es su prólogo. Además, hay los elementos fantásticos como en "El Sur" (el murciélago y el envenenamiento de la sangre) que podemos vincular con Quiroga mismo y el género de lo vampiresco en general. Por otra parte, Borges explica todas las secciones de este libro en su prólogo y vincula cada sección con un género o escritor ya establecido.

Por eso quiere citar a algunas frases de Tlön, Uqbar, Orbis Teritus que me parecen muy apropiados. Hablando de los libros en el mundo creado de Tlön, el autor nos dice que: "En los hábitos literarios también es todopoderosa la idea de un sujeto único. Es raro que los libros estén firmados. No existe el concepto del plagio: se ha establecido que todas las obras son obra de un solo autor, que es intemporal y es anónimo" (32). 

No solamente podemos vincular esa idea con el ensayo de Roland Barthes, "The Death of the Author", pero también podemos aplicarlo a la idea que propone Quiroga- siempre hay un precursor. Entonces, cada vez que Borges alude a un escritor, género o libro, está expandiendo el gran corpus de literatura y establece un vínculo entre muchos autores en un sólo cuento, una sola expresión.


El Sur


            Ya sabemos que Borges no es uno de esos autores que se enfoca en la identidad, sin embargo, creo que en su cuento “El Sur”, este es su enfoque. En este cuento, el protagonista “se sentía hondamente argentino” (219) y esto es mencionado al principio, así que desde luego se sabe que este cuento se va a enfocar en la identidad argentina. Entonces, el mito fundacional de la argentina es representado por el gaucho que es un criollo de las pampas. El protagonista, Juan Dahlmann, representa al hombre criollo que tiene sangre argentina y europea; tiene un encantamiento con el sur, donde vivía el gaucho, alaba a la llanura y detesta la ciudad, creando el concepto de Sarmiento de civilización versus barbarie.  Su enfermedad es el pretexto perfecto para regresar a ese pasado mítico donde él termina en duelo con un compadrito (que puede ser un gaucho “fracasado” que ha regresado a la pampa después de quedar desilusionado con la ciudad). Más aun, este duelo se puede ver como una representación de la batalla entre la vida y la muerte que Dahlmann está experimentando.  Lo más interesante del duelo podría ser que el hombre viejo, el viejo gaucho que estaba en la esquina de este local es quien le ofrece el cuchillo a Dahlmann. Entonces, aquí el protagonista logra convertirse en ese gaucho del pasado que siempre ha anhelado ser. “Era como si el Sur hubiera resuelto que Dahlmann aceptara el duelo” (230). Irónicamente, es por esto que el protagonista viaja al sur en sus sueños, porque es allí donde el quiero morir porque es con lo que más se siente conectado.
Más aun, pasando a otro tema muy típico de Borges que es el de su obsesión con la dobles del humano. En la página 225, el narrador nos informa que Dahlmann: “(…) era como si a un tiempo fuera dos hombres: el que avanzaba por el día otoñal y por la geografía de la patria, y el otro, encarcelado en un sanatorio y sujeto a metódicas servidumbres”. Entonces, ¿Por qué esta obsesión con el otro? No solamente en este cuento, pero en muchos de los que se encuentran dentro de Ficciones (y estoy segura que en otras obras), sentí que Borges experimentaba con esta sensación de lo doble, el espejismo y los sueños dentro de los sueños, etc. Por lo tanto, regresando a “El Sur”, en el sueño, Dahlmann obtiene lo que siempre ha querido, y en su realidad, no tiene nada más que aspectos negativos. Bueno, creo que por ahora dejare esto así, porque hay tantas cosas que se pueden decir de este cuento, como todos los cuentos de Borges.