Nationalization of Oil & Gas in Bolivia: Reactions in Peru
Below you will find national and international media coverage for May 3 and 4 on this issue. La Republica examined today APRA’s and UPP’s proposals on energy resources management.
Read also:
Evo Morales Announces Nationalization of Oil and Gas
Bolivia nationalizes oil and gas resources
Evoluciones escenograficas e intervencionismo bolivariano
“Nacionalizar en el sentido de”
Maretazo Boliviano
Por Enrique Chávez
Caretas 1923, 4 de mayo del 2006, pp. 10-13
Evo Morales y la nacionalización poco amistosa hasta con sus aliados brasileños. Toma de los campos gasíferos y petroleros agrava diferencias en la región.
Los personeros del gobierno comenzaron a merodear por los pozos el domingo por la tarde. Eran heraldos negros al acecho de las petroleras. El vocero presidencial, Alex Contreras, se apresuró en negar que su jefe fuera a presentar el decreto temido. El presidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Jorge Alvarado, le declaró al diario paceño La Razón que el equipo técnico se limitaría a “una fiscalización rutinaria mensual”. Le preguntaron cuándo cortarían la pita de esta espada de Damocles. “Eso está para verse en coca”, especuló.
Bastó esperar al mediodía siguiente. El mandatario Evo Morales se apersonó con sus ministros en Caraparí (Tarija). En el campo San Alberto, administrado por la brasileña Petrobras, leyó el Decreto Supremo 28701 bautizado como “Héroes del Chaco”. Así nacionalizaba las reservas de petróleo y gas y ordenaba la ocupación militar de 53 instalaciones privadas.
Luego Morales volvió a la capital para proseguir con las celebraciones por el Día del Trabajo. En Palacio la multitud lo recibió con la cueca Viva mi patria, Bolivia.
¿Cuándo decidió Morales la nacionalización de los hidrocarburos? La prensa altiplánica determinó que en la madrugada del jueves 27. Ese fin de semana asistió a la cumbre de La Habana con sus pares Fidel Castro de Cuba y Hugo Chávez de Venezuela. Allí debió ajustar las últimas clavijas porque Chávez aseguró públicamente la asistencia de su país al desarrollo boliviano. Se refirió específicamente al suministro de “todo el Diesel” necesario.
Chávez comprendía las necesidades de su entenado político. Apenas consumados los hechos se formaron largas colas de carros en los grifos. Presidencia emitió un comunicado tranquilizador y la Superintendencia de Hidrocarburos garantizó el abastecimiento.
¿Hay diferencias?
La decisión del gobierno boliviano tiñó de realismo crudo un concepto que ha vuelto a cundir con fuerza entre una parte del electorado peruano. Miembros del equipo económico de Ollanta Humala, más específicamente Gonzalo García Núñez y Félix Jiménez, salieron al frente para explicar que la propuesta del Partido Nacionalista es distinta a la boliviana. El propio candidato recordó que lo suyo no implica expropiar ni estatizar.
Pero ni el modelo Evo ni el mencionado decreto aluden a esos dos términos. La “nacionalización” de los recursos naturales no significó en Bolivia la expropiación ni estatización de las empresas explotadoras.
Los amigos de Humala siguen complicándole el partido. La ley anterior estipulaba que el recurso natural pertenecía al Estado hasta salir del pozo. Ahora le pertenece también después.
La diferencia esencial estriba en que las ganancias de las empresas en dos megacampos, que representan el 70% de la producción total, se reducen de 50% al 18%. Las acciones de los mismos estaban repartidas entre Andina (50%, propiedad de la hispano-argentina Repsol YPF), la brasileña Petrobras (35%) y Total (15%). El 82% de las utilidades que ahora recaudará el Estado se dividirá en regalías (18%), impuesto directo a los hidrocarburos (32%) y una participación adicional para la estatal YPFB (32%).
Los nuevos números representarán US$ 780 millones al fisco. Son US$ 320 millones más que lo obtenido con la ley de hidrocarburos vigente desde el año pasado.
Alan García dijo el martes que la situación boliviana abría nuevas oportunidades a las inversiones en el Perú.
Son vientos propicios. Esta semana el gobierno firmará cuatro contratos de exploración petrolífera con empresas privadas. Suman un total de 33 desde el 2005. Según el experto César Gutiérrez la inversión en exploración, un boom que termina años de lánguidos avances, asciende hasta el momento a US$ 2,000 millones aproximadamente.
La tasa impositiva del gas natural es de 47%, semejante a la de buena parte del continente y la boliviana antes del manazo. En el caso del petróleo la tasa peruana es flexible.
El Perú produce diariamente 100,000 pies cúbicos de gas, diez veces menos que Bolivia. Pero con el proyecto de licuefacción en Pampa Melchorita, calcula Gutiérrez, la producción aumentará en 600,000 pies cúbicos.
Con esos amigos
La nacionalización es un golpe a traición para Lula da Silva. El presidente brasileño era un entusiasta amigo del gobierno de Morales. Esta infantil sacada de vuelta puede salir muy cara.
Cerca del 60% del gas boliviano sale a Brasil y el 20% a Argentina. Los brasileños pagaban US$ 3,20 por millón de BTU y ese precio venía siendo fuertemente cuestionado.
El periodista Humberto Vacaflor escribió: “Brasil necesita el gas boliviano sí o sí, cada día, cada hora. Eso da para un cálculo. Que Petrobras aceptará lo que sea porque necesita cumplir con su primera obligación, aquella para la que fue creada: dotar de hidrocarburos a los brasileños. Si a partir de ahora se propone terminar con la dependencia del gas boliviano, muy comprensible, es algo que exige cierto tiempo: unos cuantos añitos. Suficientes añitos como para cubrir todo el periodo del gobierno actual”.
José Sergio Gabrielli, presidente de Petrobras, anunció antes de comenzar una reunión con Lula que buscarían efectivamente reducir su dependencia del gas boliviano.
En la noche del martes el gobierno brasileño emitió un comunicado afirmando que, durante una conversación telefónica, Morales le prometió a Lula respetar los contratos de suministro de gas. “Fue esclarecido que el tema del precio del gas será resuelto por medio de negociaciones bilaterales”.
El numeral II del segundo artículo del Decreto en cuestión determina lo contrario: “YPFB, a nombre y en representación del Estado, en ejercicio pleno de la propiedad de todos los hidrocarburos producidos en el país, asume su comercialización, definiendo las condiciones, volúmenes y precios tanto para el mercado interno como para la exportación y la industrialización”.
¿Y ahora?
Cavilaciones vienesas
El debate del subsuelo emergerá en Viena. Entre el 10 y el 13 de mayo se celebrará en la capital austríaca la IV Cumbre de Jefes de Estado de América Latina y el Caribe-Unión Europea. Se esperaba el plato fuerte servido en la forma del lanzamiento de las negociaciones conducentes a un Acuerdo de Asociación, con Zona de Libre Comercio incluida, entre la Comunidad Andina de Naciones y la UE.
El actual resquebrajamiento de la CAN hace olvidar que este proceso lleva cuatro años.
En la II Cumbre de este tipo (Madrid, mayo del 2002) se acordó embarcarse en el trámite. Para la III Cumbre (Guadalajara, mayo de 2004) fueron convenidas dos etapas: “Una fase de valoración conjunta del proceso de integración andino”, primero, y el inicio de las negociaciones del Acuerdo, después.
La VIII Comisión Mixta (enero de 2005, Bruselas) creó un Grupo de Trabajo Ad Hoc encargado de evaluar los aspectos técnicos para entregarlos a la IX Comisión Mixta. El grupo se reunió en Lima (abril de 2005), Bruselas (julio de 2005) y Caracas (noviembre de 2005). Su informe final debía ser presentado ante la IX Comisión, que debía ser convocada por Venezuela. A principios del 2006 la aplazó y luego la canceló unilateralmente. Ante el impasse los europeos citaron la IX Comisión en Bruselas para el 20 de abril último.
Ese mismo día Hugo Chávez anunció su retiro de la CAN.
El torpedeo del venezolano y la reciente ráfaga de balas que Morales parece dispararse al pie tienen al Acuerdo de Asociación en ascuas.
Debido a la naturaleza de la UE, una iniciativa de este tipo trascendería un mero TLC para integrar puntales de la agenda común como los de migraciones, lucha contra la corrupción, desarrollo sostenible, preservación de bosques tropicales, diversidad biológica y cultural, defensa de los principios democráticos y derechos humanos.
Así como paradójicamente Bolivia es uno de los nítidos ganadores de la CAN (CARETAS 1922), también es un beneficiario potencial del Acuerdo. Con la UE podrían obtener trato especial y diferenciado gracias a las variables que van más allá del comercio. La llamada Cohesión Social, por ejemplo, tiene en Europa una relevancia inexistente en Estados Unidos.
Durante su reciente viaje por el viejo continente, Morales consiguió condonaciones de deuda y canjes por programas de medio ambiente y desarrollo. Incluso en materia comercial Bolivia aumentó sus exportaciones gracias al Sistema Generalizado de Preferencias firmado en el contexto de lucha contra las drogas. El SGP Drogas permite el ingreso a la UE de exportaciones bolivianas de mayor valor agregado (textiles, manufacturas de cuero, muebles de madera) y otras de efecto directo en el empleo (café, quinua). Con el Acuerdo alumbraría un SGP mejorado.
El gobierno del socialista español José Luis Rodríguez Zapatero ha estado entre los principales aliados de Evo. ¿Lo seguirá siendo a pesar de las presiones de Repsol?
A Alejandro Toledo, por su parte, le toca presidir el grupo regional América Latina y el Caribe en la Cumbre de Viena. Un alto funcionario de Cancillería adelantó, en jerga toledista, que el mandatario se encuentra decidido a arrancar del evento el lanzamiento de las negociaciones “sí o sí”. Sería su canto de cisne a tres meses de dejar el gobierno.
La UE sólo negociará con un bloque armónico sin disenso interno. Con Venezuela fuera, las esperanzas de Toledo se cifran en la tríada Perú-Colombia-Ecuador y una Bolivia que al menos guarde silencio. El presidente de la Comisión Europea, José Manuel Barroso, declaró no tener reservas para empujar el inicio de las conversaciones en esas condiciones.
Pero en círculos de la CAN consideran casi imposible inaugurarlas en Viena. Esperar un Evo Morales silencioso es iluso en estos momentos. Benita Ferrero-Waldner, comisionada para Relaciones Exteriores, ha calificado la situación como “desgraciadamente más compleja”. La UE no querrá ser factor de más división andina y, trascendió, la Comisión Europea propuso patear el anuncio hacia setiembre. Para entonces, hacen cuentas, la situación de la región debería estar más despejada. Porque por el momento está para verse en coca.
Nacionalizar, si y no en Peru: Bolivia, en la campaña
Por Carlos Noriega desde Lima
Pagina/12, 4 de mayo del 2006
Finalmente, después de 24 días de una inoperante lentitud en el conteo de votos, las autoridades electorales confirmaron ayer que la segunda vuelta será entre el ex comandante Ollanta Humala y el ex presidente Alan García (1985-90), y fijaron los comicios para el 4 de junio. El pase de García a ballottage era algo que se daba por descontado hace unas dos semanas, pero la derechista Lourdes Flores insistió hasta el último momento en negarse a aceptar su segura derrota. En los últimos días fue la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia la que se metió de lleno en la campaña peruana.
García cuestionó frontalmente la decisión de Morales, aunque lo elogió por haber cumplido con una promesa electoral, asegurando que un eventual gobierno suyo no tomaría una medida similar, sino que, por el contrario, buscaría atraer las inversiones extranjeras, y llegó a plantear que Perú “sacará provecho” de la nacionalización en Bolivia “porque los inversionistas que se vayan de Bolivia buscarán otros países, como Perú”. García planteó como alternativa para incrementar la participación del Estado en las ganancias de las empresas petroleras la creación de un impuesto “a las sobreganancias”. Humala, por su parte, ratificó que se propone “nacionalizar” los hidrocarburos y otros sectores “estratégicos” de la economía, pero negó que vaya a repetir “el modelo boliviano”. Humala aseguró que un eventual gobierno suyo “no expropiará, ni estatizará” las empresas transnacionales, pero “sí renegociará los contratos”. Una fórmula sería que el inversionista privado invierta en la exploración y que una vez que se encuentre un yacimiento el Estado participaría “en igual condición con la inversión extranjera”, precisó Humala.
Renegociar y revisar contratos
Por Inés Flores
La Republica, 04 de mayo de 2006
DEBATE ELECTORAL
• El futuro de los hidrocarburos será sin duda uno de los temas debatidos por los candidatos Alan García y Ollanta Humala
• Plan de gobierno del Apra contempla renegociar algunos contratos y UPP habla de nacionalizar las actividades estratégicas.
La reacción hemisférica de la nacionalización de los hidrocarburos en Bolivia ha puesto los ojos en las intenciones de eventuales gobiernos de Alan García y de Ollanta Humala sobre este campo. En este análisis, Jorge del Castillo (Apra) precisa que la posición de su partido es la renegociación de algunos contratos, y Gonzalo García Núñez (UPP) habla de la revisión de los contratos internacionales y de aplicar un impuesto a las sobreganancias.
1. Renogociar la propuesta del Apra
La propuesta del Partido Aprista Peruano es renegociar aquellos contratos que pueden resultar lesivos para los intereses del país debido a factores que no estaban previstos al momento en que se firmó el contrato. Así lo señaló el jefe del Plan de Gobierno del Apra, Jorge del Castillo Gálvez.
Un eventual gobierno de Alan García no contempla aplicar ninguna estatización ni nacionalización. “En el Perú debe existir un principio de estabilidad política, social y jurídica, para que pueda crear un ambiente favorable a las inversiones que permita extraer la riqueza del subsuelo”, propone Del Castillo.
El Apra también contempla implementar una política de inversiones que vaya acompañada de una alta responsabilidad social y del respeto irrestricto a los derechos laborales y la protección del medio ambiente. Del Castillo destaca como un elemento clave de la propuesta del Partido Aprista la creación de un impuesto a las sobreganancias de las transnacionales para hacer llegar al pueblo los beneficios de la riqueza natural que se está explotando.
2. Revisar la propuesta del UPP
La mira de un eventual gobierno de Ollanta Humala también está puesta en la aplicación de un impuesto a las sobreganancias y en la revisión de los contratos con empresas extranjeras, según anunció el jefe del Plan de Gobierno de UPP, Gonzalo García Núñez. Con respecto al impuesto a las sobreganancias, GGN explica que son instrumentos modernos y usuales, sobre todo en una coyuntura marcada por una permanente alza del precio de los metales.
Pero UPP también contempla revisar contratos en los cuales se encuentre dificultades para su aplicación. García Núñez ha precisado que cualquier modificación se hará “de manera conversada”.
Pero GGN también enfatiza la necesidad de nacionalizar actividades estratégicas, “que comprende la independencia, los objetivos de la transformación energética de corto y largo plazo, las medidas y los objetivos en materia de reducción de precios”. Marcando distancias entre las propuestas de Humala y las de Evo Morales, GGN aclara que el concepto nacionalista de UPP significa “poner los sectores estratégicos, como energía y electricidad, al servicio del desarrollo de los peruanos”.
3. Planes de gobierno
No todas las propuestas detalladas en los últimos días por los voceros del Apra y UPP figuran con similar énfasis en los planes de gobierno de ambas agrupaciones. En la propuesta escrita del Apra solo se menciona la necesidad de “evaluar todos los contratos suscritos en nombre del Estado a fin de renegociar aquellos que por falta de equidad y transparencia, afecten los intereses de la Nación, buscando una adecuada utilización de los recursos y justa distribución de sus beneficios”.
Sobre este punto el Plan de Gobierno de UPP, denominado “Nacionalización de las actividades estratégicas”, señala que los hidrocarburos junto al gas, la electricidad y otros servicios “serán actividades estratégicas puestas al servicio del desarrollo de la nación y de los peruanos”.
UPP plantea: renegociación de los contratos de licencia del Lote 88 (gas natural de Camisea) y para la explotación del gas natural del Lote 56. Asimismo, revisión de los contratos de transporte y distribución del gas natural a Lima y de exploración petrolera ofrecidos por Perupetro a los inversionistas. También la participación de Petroperú en todas las fases de sus actividades. Y en las concesiones de los lotes de hidrocarburos el contratista asumirá el 100% del riesgo para la explotación.
“Estatización y nacionalización es lo mismo”
Estatización:
Proceso por el cual una empresa o un sector económico pasa a ser controlado directamente por el Estado. Esto ocurrió en la década del 70 en el Perú con el gobierno militar encabezado por el general Juan Velasco Alvarado. Confiscó medios de comunicación, expropió haciendas y la empresa norteamericana International Petroleum Company. “Lo que hizo Velasco fue estatización que también se llamaba nacionalización, proceso que en ese momento respondía a una coyuntura histórica mundial, que venía desde la revolución de Cuba, la revolución de China, Allende intentó una serie de reformas en Chile en esa dirección, pero ahora el mundo está en otra dirección”, sostiene el historiador Manuel Burga.
Nacionalización:
La definición del concepto en sí indica que “es un acto por el cual pasan a depender del Estado las propiedades, industrias o servicios públicos. El presidennte de Bolivia Evo Morales se ampara en este término para explicar la medida adoptada en su país con respecto a los hidrocarburos. Igualmente, Ollanta Humala habla de nacionalización. Pero Burga, rector de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos, señala que en la Constitución del Perú como en la de Bolivia se indica que los recursos del subsuelo son propiedades del Estado. “No sé si como estratagema polítca quieren que se diferencie nacionalización de estatización, cuando son lo mismo”, explica. Es más, Burga percibe que es una modalidad “para ocultar lo que es un proceso de estatización tan fuera del contexto histórico”. Agrega: “Quieren ocultar una derivación histórica con el eufemismo ‘nacionalizamos recursos'”. Dice que la propuesta de Humala está en la misma corriente. “Al comienzo reivindicaba la reforma de Velasco y ahora ha desistido”, agrega, no sin antes reconocer que el tercio de la población que votó por él en la primera vuelta lo respalda.
PPK afirmó que sería negativo para el Perú nacionalizar recursos
La Republica, 03 de mayo de 2006
• El jefe del gabinete dice que una medida así en el Perú afectaría la inversión y la producción
No quiso opinar sobre la situación por la que pasa Bolivia, pero sí advirtió la inconveniencia de que una medida similar se aplique en el Perú. El presidente del Consejo de Ministros, Pedro Pablo Kuczynski, señaló muy seriamente que sería negativo para el Perú que se decrete la nacionalización de nuestros recursos naturales.
Agregó que ello afectaría la inversión y la producción en el Perú, pero no quiso opinar más sobre la decisión de Morales, de ordenar a las petroleras privadas devolver al Estado boliviano la propiedad de los hidrocarburos, militarizando los campos de crudo y gas.
“Cada uno baila con su pañuelo y hace lo que mejor le conviene”, subrayó PPK.
“Políticas ineficaces”
Por su parte, el titular de Economía y Finanzas, Fernando Zavala, sostuvo que es lamentable que se regrese a políticas que no funcionan, y anticipó que la medida dispuesta por Evo Morales tendrá consecuencias económicas y de inversión para Bolivia en los próximos años.
Aunque Zavala tampoco cree en los impuestos a las sobreganancias, como lo propone el Apra. En esta lógica, señaló que si se les quita algo cuando a los inversionistas les va bien, se les debería dar algo cuando les va mal.
El dato
MALA SEÑAL. El ministro Alfredo Ferrero señaló que la medida de Bolivia es una señal negativa para la comunidad internacional.
Gobierno mira con preocupación riesgo de alejar la inversión
Peru 21, 3 de amyo del 2006
– Premier Kuczynski recuerda que Perú ya probó eso hace años con resultados negativos.
– Glodomiro Sánchez dice que gobiernos deben generar confianza y reglas de juego claras.
La posibilidad de que en el Perú se aplique una medida similar a la tomada por el presidente Evo Morales, quien nacionalizó el lunes los recursos hidroenergéticos bolivianos, no solo ha puesto los pelos de punta a los inversionistas nacionales sino que ha causado preocupación entre algunos funcionarios del Gobierno.
Si bien aclaró que Bolivia es un país y el Perú otro, y que “cada uno baila con su pañuelo”, el premier Pedro Pablo Kuczynski consideró que una medida similar no es aplicable aquí para nada, “ya que el Perú probó todo eso con resultados nada positivos, y no se debería repetir el plato”.
Kuczynski agregó que para nuestro país sería perjudicial nacionalizar los recursos naturales porque tenemos una economía de mercado que funciona en base a inversión privada en los sectores comerciales.
“El Estado no tiene recursos para invertir en hidrocarburos o en petróleo. Tenemos una participación a través de Petroperú, y eso funciona relativamente bien, pero aun ahí se necesitan recursos que no tenemos”, precisó.
El ministro de Energía y Minas, Glodomiro Sánchez, sostuvo, por su parte, que la nacionalización significaría un retroceso ya que el Perú ha respetado las reglas de juego y otorgado seguridad jurídica a los inversionistas.
“Esta iniciativa tendrá un impacto negativo para Bolivia en el corto y en el largo plazo porque un gobierno requiere generar confianza. Esperamos que quien suceda al presidente Toledo sepa mantener una política económica y jurídica clara”, invocó.
MALA SEÑAL. De otro lado, el ministro de Comercio Exterior, Alfredo Ferrero, calificó como “una mala señal en el contexto mundial actual” lo que ha ocurrido en Bolivia, y expresó su esperanza de que dicho país no se retire de la Comunidad Andina de Naciones.
“No digo que sean iguales, pero hay cosas en el plan de gobierno de Humala que se parecen mucho a lo que está haciendo Evo Morales. Hay que esperar que sea Humala el que haga las aclaraciones”, estimó.
Ferrero definió luego como “un TLC bamba” el acuerdo firmado entre Venezuela, Cuba y Bolivia, ya que Bolivia le vende a Cuba productos por 5 mil dólares al año, y por el TLC con Estados Unidos las perspectivas de exportación son del orden de los 5 mil millones de dólares.
El ministro de Economía, Fernando Zavala, lamentó que con las nacionalizaciones se regrese a políticas que “ya sabemos cómo funcionan”, en lugar de pensar en cómo generar empleo.
UN DESLINDE. Samuel Gleiser, presidente de la Cámara de Comercio de Lima, expresó, a su turno, el sentir de los empresarios nacionales. “¿Usted cree que alguien va a invertir en Bolivia? Si en el Perú se hace lo mismo, la respuesta será igual: No”, opinó.
Señaló que los inversionistas tienen preceptos y perfiles internacionales y que donde haya una medida de este tipo no habrá inversión nacional ni extranjera, por lo que el futuro del país quedará mediatizado.
En este sentido, le pidió al candidato de UPP, Ollanta Humala, que haga un claro deslinde sobre este tema para que el país sepa si, tal como consta en su plan de gobierno, va a nacionalizar o no los recursos naturales de llegar al poder.
Óscar Gonzales Rocha, vicepresidente de la Sociedad Nacional de Minería, exhortó también a los principales dirigentes de UPP a que se pongan de acuerdo, “ya que las contradicciones sobre este tema son malas”.
Repsol YPF y Petrobras entre la espada y la pared por nacionalización de Evo
Lenka Zàjec Yelusic
La Republica, 03 de mayo de 2006
SOLO QUEDA NEGOCIAR
• Empresas transnacionales se inclinan por negociar con el Estado antes de marcharse
• Decreto establece que Estado se quedará con el 82% del total de los ingresos y las empresas con el 18% en forma transitoria; es decir, esa cifra puede variar.
DE ACUERDO. Al día siguiente de la nacionalización, encuestas televisivas mostraron que la población apoyaba la medida.
El festejo por la nacionalización del petróleo y el gas en Bolivia aún no termina en el “Palacio Quemado”, mientras tanto, las especulaciones respecto a la decisión que tomarán las transnacionales que operan en el país altiplánico crecen como la espuma.
Si bien el presidente de la petrolera estatal brasileña Petrobras, José Sergio Gabrielli, declaró que la medida adoptada por el gobierno de Evo Morales “torna económicamente inviables las operaciones” en Bolivia, se cree que la empresa se quedará en el país andino, aunque luego de una negociación que amenaza con ser intensa.
Se quedan
Fuentes gubernamentales brasileñas informaron a la agencia Reuter que ayer Gabrielli hizo saber al presidente Luis Inácio Lula da Silva que Petrobras seguirá operando en Bolivia.
Para los expertos, es muy probable que esto ocurra debido a que la empresa brasileña ha invertido U$S 1.600 millones en la última década y, lo quiera o no, depende del gas que le suministra Bolivia, por lo que no le es conveniente “enemistarse” con el país vecino.
A esto se suma el hecho de que el decreto 28701 dictado por Evo Morales establece porcentajes de distribución de ingresos “transitorios”. Es decir, todo apunta a que el 18% de utilidades fijados para las transnacionales podría variar en función de las negociaciones.
Lula da Silva, sin embargo, ha advertido que Brasil actuará con firmeza para “preservar los intereses” de Petrobras.
Fuera de lógica
La hispano-argentina Repsol YPF, por su parte, difundió un comunicado en el que advierte que la nacionalización de los hidrocarburos resulta “inquietante”.
El presidente de esa empresa, Antonio Brufau, dijo en Argentina que el decreto está “fuera de toda lógica empresarial que debe guiar todas las relaciones entre empresas y Estados”.
Brufau no habló de dejar de operar en Bolivia, pero sí de analizar la norma y de aprovechar el plazo de 180 días para alcanzar consenso.
De prosperar esta gestión entre el gobierno boliviano, Repsol, YPF y Petrobras, así como las otras compañías que operan en el vecino país, sería una oportuna demostración de que las renegociaciones son posibles.
Lula, Morales y Kirchner en cumbre
Los presidentes de Argentina, Néstor Kirchner; de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva; y de Bolivia, Evo Morales, se reunirán de emergencia el próximo jueves en la ciudad de Iguazú para evaluar lo concerniente a la nacionalización de los hidrocarburos en el país altiplánico. La participación del presidente de Venezuela, Hugo Chávez Frías, todavía no está confirmada.
El gobierno boliviano advirtió que está al tanto de que algunas de las empresas petroleras que operan en su país preparan medidas legales para frustrar la nacionalización de los hidrocarburos. El viceministro de Coordinación Gubernamental, Héctor Arce, desestimó cualquier recurso con el argumento de que el decreto 28701 ha sido elaborado con sumo cuidado.
Precisiones
NIEGA INFLUENCIA. El gobierno de Evo Morales negó que los presidentes de Cuba y Venezuela hayan influido en la decisión de nacionalizar el gas y el petróleo en Bolivia. Asimismo, reiteró que no venderán gas a Chile hasta que no se resuelva el tema de la salida al mar.
OTROS INTERESADOS. El ministro boliviano de Hidrocarburos, Andrés Soliz, dijo que en adelante no habrá más negocios en Bolivia sin la participación de por lo menos el 50 por ciento más uno por parte de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB). Soliz, en ese sentido, indicó que si Petrobras o Repsol YPF no están interesados en la oferta, existen compañías de China, la India y Rusia que quieren invertir bajo las nuevas condiciones.
Peru, Miercoles 03 de Mayo del 2006 Ultima actualización: 03:36:31 AM
Lo bueno y lo malo de la nacionalización de hidrocarburos
La Republica, 03 de mayo de 2006
• Experto en hidrocarburos César Gutiérrez explica los pros y los contras de la nacionalización de hidrocarburos impulsada por Evo Morales en Bolivia.
1. Lo bueno
Bolivianos esperan que medida sea viable.
Desde el punto de vista político, la decisión del presidente de Bolivia, Evo Morales, de nacionalizar los hidrocarburos, lo ayudará a mejorar la aceptación popular de la que goza. Se debe recordar que en abril el jefe de Estado boliviano cayó 12 puntos en las encuestas por no haber adoptado medidas concretas como las que prometió durante su campaña electoral.
De otro lado, la nacionalización de los yacimientos de petróleo y gas generará un ingreso adicional al Estado de 780 millones de dólares. Es decir, 320 millones de dólares más de los que recibe actualmente.
El Estado boliviano, al tener una participación de más del 50% en las actividades hidrocarburíferas, tendrá un mayor control en lo que a precios y volúmenes de comercialización se refiere.
2. Lo malo
Bolivia no produce suficiente petróleo para cubrir sus necesidades internas (solo produce 40 mil barriles por día), así que el rompimiento de sus relaciones con Repsol YPF o Petrobras le podría generar grandes problemas.
Para autoabastecerse de diesel requerirá seguir con la exploración. No es bueno confiarse de un solo abastecedor, por más amigo que parezca. La oferta de Chávez para proveerlo de diesel podría resultar insuficiente.
Ahora bien, explorar significa invertir, y en ningún país de la región las sumas que se requieren pueden ser cubiertas únicamente por el Estado. Se requiere necesariamente de capitales privados.
Aun cuando Bolivia quiera exportar gas como materia prima, los bolivianos necesitarán de unos 2 mil millones de dólares.
Un dato adicional. Si Evo Morales no logra generar una buena relación con las petroleras que hoy se han visto afectadas, difícilmente podrá lograr sus objetivos y la nacionalización lo llevará por un peligroso sendero.
Apra también apuesta por revisión de contratos de empresas transnacionales
Inés Flores
La Republica, 03 de mayo de 2006
APERTURA AL MUNDO
• Alan García dice que no es tiempo de estatizaciones sino de aprovechar el crecimiento del mundo
• Asegura que renegociando contratos se pueden obtener mayores recursos para el pueblo y el Estado
• Dijo que Evo cumplió promesa electoral.
Contrario a optar en estos momentos por el camino de las nacionalizaciones, Alan García defiende su propuesta de renegociar algunos contratos con inversionistas extranjeros a fin de obtener más recursos para el pueblo y el Estado.
El candidato presidencial del Apra está seguro de que la vía es aprovechar el crecimiento del mundo y de la enorme cantidad de dinero de inversión extranjera.
“El Perú está abierto al mundo –subrayó–. Hay enormes posibilidades de conseguir cinco o seis veces más inversión de la que actualmente recibimos, y si logramos que esa inversión genere mucho más empleo, el Estado tendrá recursos para impulsar la agricultura, la pequeña y microempresa y los servicios como el agua potable en todo el país”.
Evo cumplió
Si bien el líder aprista no comparte la medida de nacionalizar los hidrocarburos en Bolivia, García señaló que el presidente Evo Morales ha cumplido su promesa electoral y, en ese sentido, no lo ve mal. Sin embargo, opinó que tal vez el presidente boliviano pudo haber optado por otro camino. Dijo que es mejor aplicar un sobreimpuesto a las sobreganancias petroleras que permitiría al Estado obtener más ingresos y, al mismo tiempo, más inversión.
No obstante, señaló que el paso dado por Bolivia terminará favoreciendo a nuestro país “porque las compañías petroleras que iban a perforar pozos petroleros bolivianos ahora vendrán al Perú”.
Promesa de Ollanta
Alan García recordó que su contendor Ollanta Humala planteó en su campaña de la primera vuelta nacionalizar los recursos estratégicos; por tanto, agregó, “se supone que cumplirá su promesa electoral al igual que lo hizo Evo Morales”.
Pero advirtió que ello no es lo más conveniente ahora. “Yo soy antiimperialista, creo en la izquierda democrática y eso debe conducirnos a crear más empleo y los servicios que el pueblo tiene”, anotó.
Alan: Ollanta está equivocado
Alan García señaló que su contendor Ollanta Humala “está muy equivocado” si cree que las elecciones se conducen viajando a La Libertad para provocar a los apristas o a Cayara a buscar afectarlo, como lo ha hecho. “Esas propuestas no parecen sensatas. El Perú necesita un cambio responsable que genere empleo, recupere los derechos sociales, mejore las tarifas públicas y la justicia social, y no creo que ese tipo de provocaciones conduzca a algo positivo”.
Frente a las impugnaciones de actas presentadas por UN, dijo que no pierde la paciencia ni se incomoda por ello. Estas declaraciones las dio García luego de visitar al cantante Arturo “Zambo” Cavero, en cuya casa almorzó y cantó música criolla al ritmo de la guitarra y el cajón. Lo acompañó su esposa.