Monthly Archives: November 2015

Trasfondo, Patricia Ratto

Esta novela trata de la historia de un mecánico de submarino argentino que despierta en medio de una misión de combate en la cual debe proteger y atacar varias posiciones a lo largo del océano mientras trata de sobrevivir a las malas/deteriorables condiciones en que el mismo submarino se encuentra y a los constantes ataques que los ingleses les acechan. La narración esta exquisitamente contada y es presentada al lector a través del narrador, del cual no conocemos su nombre y su identidad hasta el final del libro. Desde las primeras páginas debo admitir que la lectura fue muy intrigante porque tuve la sensación de que se trataba de una historia fantasmal y seguí leyendo porque la curiosidad de confinar la identidad del protagonista era demasiada como para no saber si mis sospechas eran ciertas o no. Para mi Trasfondo, más que una historia fantasmal, que evidentemente lo es, es una historia en busca de la propia identidad en sí. No solo como individuos, sino como ciudadanos de naciones que mandan a soldados a la guerra sin están correctamente equipados, pero que de igual manera se les exige cumplan con su misión a como dé lugar.

Hay varias recurrencias durante toda la lectura la cual enmarca la narración y la hacen mucho más interesante. Estas repeticiones hacen que la narración tome un tono de angustia, solitud, pánico, la cual reflejan el ambiente que se viven dentro de la misión y que se siente entre la tripulación. Repeticiones como el ruido (“el ruido me despierta”), el sueño, el bicho (el cual hace alusión a la novela de Fogwill – Los Pichiciegos), la niebla, el malfuncionamiento, el frio, la humedad, el agua, la profundidad, la falta de memoria, las botas, la Hiena, etc., son muchas de las palabras que continuamente se repiten. Al mismo tiempo, estas palabras dejan de ser solo eso para adquirir significados más amplios que hacen que la historia tome un carácter analítico y suspenso mucho mayor. A la vez que, hacen que el narrador se convierta en un personaje central, fascínate, y muy misterioso. El narrador es un personaje con ciertas características únicas, casi de carácter omnisciente que sabe mucho, escucha casi todo, y ve mucho sin casi ser percibido por sus compañeros, pero lo que el narrador observa casi siempre es analizado a un nivel muy superior a lo que cualquier otra persona haría y desmenuza, transforma, sobre analiza las situaciones cada vez más intensamente. El narrador siempre está en estado de observación, mirando, leyendo, registrando lo que pasa a su alrededor, con su tripulación. A la vez que también se preocupa y trata de analizar sus sentimientos, su pasado, y sus recuerdos.

En Trasfondo, los diferentes estados anímicos y psicológicos del soldado (marinero) se tratan de contextualizar a una profundidad mayor comparada con otras obras que hemos leído hasta ahora. Los soldados del submarino, al estar en zonas muy profundas, sufren bastantes trasformaciones físicas y mentales que acarean consecuencias temporales y de largo plazo, las cuales son trasplantadas con ellos hasta sus casas de regreso en argentina. Este espacio limitado del submarino, también expone las otras limitaciones a las cuales los marineros sobrellevan, tales como la falta de agua, ropa limpia, privacidad, sexo, entre otras. Con estas limitaciones las cuales sobresalen al leer el libro, se siente una mayor apreciación por la misión que los pasajeros del submarino cumplen. De otro modo, también se siente su desesperación, cuando en medio del combate, uno de los varios cohetes que lanzan no funciona. Esto hace que siempre estén en con constante pánico para no ser vistos, de querer estar fuera del radar de los ingleses que parece nunca duermen y que siempre están al acecho. El narrador analiza los efectos de la guerra, los muertos, sus partes a la deriva, su sacrificio.

También se ve la critica que Trasfondo hace a la guerra, cuando el narrador dice que “quizás todos seamos personajes de una historieta ridícula”. Esta misma imagen de la caricatura se repite varias veces durante el libro al mismo tiempo que también contrasta con el estado permanente de confusión en que se encuentra el narrador, el cual nunca logra comprender porque hace lo que hacer.Su misión fue fríamente calculada por individuos cuyas vidas nunca estuvieron en peligro inminente y desde la comodidad de sus escritorios decidieron el futuro de muchos hombres que ciegamente siguieron órdenes. Es más, muchos de estos soldados perdieron la vida por cumplir una misión tonta, sin futuro, sin sentido como lo fue la guerra de las Malvinas.

Trasfondo

Patricia Ratto, Trasfondo

The Falklands/Malvinas war was a conflict fought as much, if not more, at sea as on land. A majority of the casualties on both sides came from attacks on shipping, especially if we include the British losses from landing craft at Bluff Cove. Five larger ships were also sunk, including HMS Sheffield and the Atlantic Conveyer. For the Argentines, almost half their dead came from one incident: the controversial sinking of the General Belgrano. But it was largely thanks to the loss of the Belgrano that there were no naval battles in the strict sense, that is, no ship-to-ship conflict. All the British ships were hit by shore-based aircraft; the Belgrano itself was torpedoed by a submarine. And in response to the cruiser’s destruction, the Argentine fleet was recalled to base for the duration of the conflict.

With one exception. From May 2 to May 17, 1982, the submarine ARA San Luis was the sole representative of the Argentine navy in active operation. It is this ship’s story that is the subject of Patricia Ratto’s Trasfondo.

The novel is essentially a ghost story. For a submarine is always in some sense a spectral presence: largely invisible, hard to locate, registered only by faint echoes, yet the source of intense anxiety and fear. A submarine is a fantasmatic object par excellence. Yet Trasfondo shows that from the perspective of the submarine and its crew, the ships on the surface and even the war as a whole were equally ghostly and unknowable. Down below–and the San Luis was almost permanently submerged–neither sea nor sky could be glimpsed; the enemy could be discerned only through careful attention to faint traces on the Sonar. The few times that the vessel surfaced, it found only gloom and fog. On the whole it was out of range of any communication or maintained radio silence. As Martín Kohan notes, its crew were at the center of the action, but in some ways were further removed from the war than anyone.

On board, time becomes elastic and the combination of boredom and tension plays strange tricks on the mind. The crew are soon lost in “a labyrinth of echoes and rumours, as they wait for what the sea may bring them” (72). Small details become both comfort and distraction: a jar of capers that rolls around the boat; the narrator’s boots that seem to have a life of their own. Some draw, some read, others play cards to pass the time. It’s better to be doing something, no matter how futile. Most of the men put on their lifejackets as the enemy approaches (the youngest crewmember never takes his off), but they know that this will do them little good in the event of disaster. For if they are hit, “There won’t be time for anything, no time to call out, no time to escape, no time to hear, no time to see, the blood will stain the water with a thunderous red that bit by bit will be diluted until it is just water again” (79). Often enough it seems as though this doomed mission is already at an end: “Perhaps we are all dead already, one coffin piled up on another, but we simply haven’t noticed yet. Can one really die and not know it?” (71).

At the core of the book is the question of the relationship between knowledge and death: the knowledge of death, but also the knowledge that death either enables or obscures. Ratto reports that she was inspired by Giorgio Agamben’s observation about the Nazi concentration camps, that the only “comprehensive witness, who has experience of it all [. . .] would be the one who dies in the camp and so, paradoxically, the one deprived of a voice with which to testify. Meanwhile, those who survive have the voice to tell of what happened, but their experience is partial, incomplete. What we have, then, is always a lacuna, a grey zone that is impenetrable, inaccessible, without a voice to narrate it.” In Trasfondo, Patricia tries to give voice to this dead zone at the heart of any tragedy, any war, only to find that it is less the place of clarity and understanding than a new depth of epistemic murk where even the border between life and death itself becomes unstable, uncertain.

Transfondo – Patricia Ratto

Para mi, la novela Trasfondo escrita por Patricia Ratto fue la mas dificil de leer y comprender, no por la dificultad del vocabulario, pero por su entorno claustrofobico y una distancia inhumana que el autor crea a traves del narrador etereo. Para mi, parecia un narrador de Schrodinger – existe y no existe al mismo tiempo, el sabe todo lo que esta pasando en el submarino, pero nosotros no sabemos mucho sobre el (hasta el fin). El narrador tambien ayuda en crear el ambiente claustrofobico que los soldados habian vivido. El submarino tiene una existencia ironica – esta en el medio de todo el combate pero tambien lejo de todo la accion al mismo tiempo (como el narrador). Su presencia crea miedo en los enemigos, pero la gente en el submarino ni siquiera saben que esta pasando afuera, y ellos mismo estan separados con la oscuridad infinito y desconocido del mar atlantico solo por hojas de metal. Mi cita favorita que representa este sentido claustrofobico sera: “Cuarenta centímetros hasta el techo, y después, toneladas de agua helada, toneladas de oceano sobre mi cabeza, sobre las cabezas de los otros” . Por tanto, Mi parte favorita de la novela es el narrador y el efecto que el crea. No sabemos mucho sobre el, a parte que es un marinero que nos describe las experiencias de sus companeros pero nunca interactua con ellos. Con esta distancia, el autor crea un frialdad (en ingles yo diria an inhuman distance)– diferente a los otros libros que hemos leido en este curso, que normalmente describe escenas llena de sangre, balas, y sufrimiento.
Este libro me hizo pensar en el gran pensador militar Carl Von Clausewitz, que he estudiado en mi programa de relaciones internacionales. Segun el, una de las partes mas importantes de la guerra es la paciencia, porque para los combatientes,  no hay nada para hacer durante la mayoria del tiempo. En la guerra, el esperar es parte de la strategia, para exponer los debilidades de sus enemigos y esperar por el momento perfecto en attaque (como los soldados en el submarino, moviendo incognito y esperando para sus enemigos). Por tanto, la narrativa y la trama esta novela esta dividida entre la acción y la inacción, pero la inacción es tambien parte de la accion. Por ejemplo, los marineros no deben hacer ruido, para que los radares de los enemigos no puedan detectarlos (parte de su strategia de guerra). En el submarino, los marineros tiene que quedarse abajo por muchos dias en continuación, viviendo en soledad para una ventaja militar. por tanto, la inaccion tiene, en mi opinion, la misma importacia que los actos explícitos de la guera (como tirar una bala o matar a alguien). Esta novela me hizo pensar en las historias que me contaban mis tios, que lucharon en la guerra. Segun mi tio Luis, ellos tenian que esperar y campear afuera por mas que 7 dias para obtener intelligencia sobre la fuerza naval de gran bretana, recordando datos y tiempos de sus movimientos. Aunque en ese tiempo parecia que el no estaba en guerra o haciendo nada, la información que el colecto con su escuadrón fue usado para hundir barcos y mataron a otros soldados. La inaccion = La accion.

 

Los Pichiciegos

La novela, los Pichiciegos, escrita por Rodolfo Enrique Fogwill, se trata de la guerra de las Malvinas. Este libro toma una posicion diferente, comparados a los otros libros que hemos leido sobre la guerra. En este libro, la guerra es representada como una tonteria. Yo no se mucho sobre la guerra de las Malvinas, pero con lo que he leido, yo no le veyo mucho sentido. A diferencia al libro del Claribel Alegria, en que la protagonita da su vida sin complicacion a la lucha, los pichiciegos, en realidad, no quieren morir por esta guerra, porque no le ven un sentido. Ellos estan mas envueltos en vivir una vida con mas sentido y proposito, como estar con mujeres y tomar etc. Este posicion se puede decir es mas realistico de la guerra, en que la poblacion no queire estar metida. El sacrificio en esta novela no esta presente en un modo positivo, pero en un modo negativa.

Los Pichiciegos

Los Pichiciegos de Rodolfo Enrique Fogwill, tiene como tema central la guerra de las Malvinas (1982) cuando, después de muchos años de parte de Argentina en tratar de recobrar esta isla de forma pacífica, decide irse a la guerra para acceder a este territorio que consideraba suyo. Básicamente, con esta novela Fogwill quiere contar, no desde el punto de vista del conflicto bélico directo sobre lo que acontece en las Malvinas, sino desde el punto de vista del conflicto indeseado el cual se evade a toda costa. Es más, la definición que los soldados sobre el ‘pichi’ (Pichiciegos) es bastante particular, “El pichi es un bicho que vive debajo de la tierra. Hace cuevas. Tiene cascara dura- una caparazón- y no ve. Anda de noche. Vos lo agarras, lo das vuelta, y nunca sabe enderezarse, se queda pataleando panza arriba (35)”. Con esta definición sobre lo que es el pichi, un animal terrestre, que vive escondido debajo de la tierra y que no ve pero anda de noche, también en ella se ve la similitud con los soldados. Esta misma descripción coincide con el comportamiento que el campo de detractores o fugitivos de la guerra en los cuales se convierten los Pichiciegos. En sí, la novela quiere dar a conocer lo absurdo de la esta guerra donde las fuerzas Ingleses fueron mucho más equipadas para ganarla, inclusive antes de que empezara, pero a la que de igual manera miles de soldados argentinos acudieron a defender en nombre de la patria. Ellos, los Pichiciegos, no creen en esta guerra absurda y tonta y la evaden.

Del mismo modo, la relación de ceguedad del pichi, relacionada directamente en los Pichiciegos, está narrada más de una vez por la voz narrativa principal. Por ejemplo, cuando dice: “De noche hay menos viento y además no te ven. Hay que abrigarse, untarse todo: la cara, el cuello, las muñecas, las piernas y los pies” (35). De esta misma manera se les caracteriza a los soldados que escapan del conflicto como animales que viven escondidos bajo tierra, a ciegas, de noche, tratando de recoger lo que otros dejan botado (basura algunas veces) para ellos poder comer y sobrevivir. Las condiciones infrahumanas en la que estos soldados jóvenes viven en su “cueva” son deteriorables. Desafortunadamente, y a pesar de que ellos son militares, deciden vivir en estas condiciones para escapar a una guerra absurda, desigual, a la que muy seguramente no escaparían con vida. Al untarse de todo (lodo), pierden su identidad como seres humanos, y toman una identidad más camuflada, más animal, similar a la del pichi, para permanecer con vida. La descripción continua, “De noche es más difícil caminar, pero hay menos peligro; yendo de día pueden disparar de cualquier lado, de cualquier bando. Te ven, disparan” (43). Ser vistos significa estar muerto. La invisibilidad, el camuflaje, el no querer ser reconocidos en tiempos tan peligrosos como lo son los tiempos de guerra, llevan a que el soldado que no quiere estar activo en el conflicto, busque alternativas de escape que lo lleve a estar con vida.

En esta novela, y de manos de Fogwill, se ve también la compasión y talvez la tristeza de parte de los soldados ingleses por los argentinos. Dicha compasión se ve cuando los soldados Ingleses, a cambio de ‘información’ les dan provisiones las cuales garantizan su manutención para vivir a toda esta situación de guerra. Los soldados ingleses no los ven como iguales, es más se ríen de su condición en estado de abandono. Es más, la vos narrativa comenta, “Seguían pasando soldados y aviadores que los miraban, reían y se quedaban un rato observándoles las botas carcomidas de roce” (50). Es por esto mismo, su situación, su incapacidad de sobrevivir (y del estado argentino por proveerles), que ellos a cambio de información ficticia, vender a los suyos a cambio de poder comer, tener baterías, y otros utensilios para continuar a flote. Los soldados ingleses se apiadan de ellos (los Pichiciegos) y les dan, “…bolsas con chocolates y cajas de cigarrillos. Había treinta cajas de 555 cortos, cada una con diez paquetes de cartón. Azúcar tampoco ellos tenían” (51). Para mí todo esto en un acto de pesar a la vez que es un acto táctico de guerra.

De esta manera, la novela los Pichiciegos se convierte no en una historia de la guerra de las Malvinas en sí, sino de los soldados que tratan de vivir a consta de lo que sea. En este transcurso de circunstancias, ellos aprenden que inclusive estando bajo tierra, las idiosincrasias del hombre siempre están presentes, que unos están al mando y otros tienen que obedecer. Pero que de una manera u otra, el mundo subterráneo de los Pichiciegos es un mundo construido por ellos mismos, donde las repercusiones de sus actos son más conscientes de lo que puede ser si hubieran seguido las órdenes generales del comando argentino. El seguir sus propias órdenes (internas) los llevan a sobrevivir en un mundo (externo) de guerra donde los que se enfrentan a enemigos más fuertes terminan ‘congelados’, mejor dicho: muertos y abandonados.

Los Pichiciegos

Los Pichiciegos de Rodolfo Fogwill narra la historia ficticia de la Guerra de Malvinas. El estilo del libro está formado principalmente por conversación fragmentada y casual, que atrae a los lectores en la historia desde la primera página. Me gusta mucho las descripciones artísticas del autor como la primera frase “que no era así, le pareció. No amarilla, como crema; más pegajosa que la crema,” y parece a mí que las novelas argentinas son un poco similares a los españoles que los salvadoreños.

 

Es interesante que los protagonistas se llaman a si mismos Pichicera que está basado en “el Pichi” que “es un bicho que vive abajo de la tierra. Hace cuevas. Tiene cáscara dura-una caparazón- y no ve. Anda de noche. Vos lo agarrás, lo das vuelta, y nunca sabe enderezarse, se queda pataleando panza arriba,” y este ajuste sabiamente convierte en novela de ficción, pero la representación de la realidad al mismo tiempo. Creo que el hecho de que viven bajo tierra representa los efectos de la dictadura como la opresión y critica a la dictadura militar de aquel tiempo. También estoy interesado en que el uso de la cueva o la lugar para esconderse en esta novela y lRéquiem por un campesino español de Ramón J. Sender. Ambas novelas tienen fuertes componentes religiosos como en Los Pichiciegos algunos de los nombres de los principales protagonistas son “Los Reyes Magos,” y en Réquiem por un campesino español, ni que decir, todo lo que lleva elementos religiosos. Creo que la idea de que no importa que tan corrupta la religión es, la idea de la religión es un lugar sagrado y seguro está representado por estes elementos religiosos de la cueva.

 

Me gustó mucho las frases finales: “El mar estaba azul, con olas que corrían cargadas de espuma como corderitos, a favor del viento sur. En la playa, el mismo viento levantaba remolinos de arena y valvas finas de mejillón y los iba arrastrando para el lado del pueblo. Volvió aprender un cigarrillo, pitó, sintió más seco el humo, lo sopló, miró cómo se deshacía entre los remolinos y decidió seguirlo y también él se dejó ir con el viento a favor, hacia el norte, hacia el lado del pueblo.” El sentido poético y artístico de las frases se notan el sentimiento del autor y también la habilidad del autor como escritor. Creo que el autor concluyó la novela de algo positivo que representa su esperanza hacia el futuro.

Los Pichiciegos: visiones de una guerra subterránea

Lo primero que me vino a la mente al leer esta novela fue cuan parecidas eran las conversaciones entre los “pichiciegos” a las que he experimentado personalmente durante mis viajes a Argentina. El estilo narrativo capturó la charla constante, los discusiones, los chistes y el sarcasmo – con todos hablando a la vez, todo lo cual veo como características identificadores de la personalidad argentina. Por lo general, la narración reflejaba las particularidades del habla argentina, con las conjugaciones del “voseo”, los insultos coloquiales como “boludo”, y la rapidez persistente de los personajes. Por otro lado, se destacó la insensatez subyacente de la situación, de cómo se sentía ser argentino bajo esas circunstancias, y la tendencia de los argentinos a criticar y rechazar lo propio, pero siempre con un toque de humor aunque sea muy bruto. Por ejemplo, cuando le preguntan a los “pichis” “¿Qué querrías vos?” uno de ellos responde, – “Culear y ser brasilero” (49).

De tal forma, ante la absurdidad de la situación en la que se encuentran, se halla cierta humor mordaz en los diálogos y comentarios de los soldados desertores, lo cual tiene el efecto de distanciar el lector de la verdadera tragedia de sus condiciones. Por ejemplo, el tema del polvo químico: “Con polvo químico y piso de tierra, caga uno, cagan dos, tres, cuatro, o cinco y la mierda se seca, no suelta olor, se apelotona y se comprime y al día siguiente se la puede sacar con las manos, sin asco, como si fuera piedra, o cagada de pájaros” (60). En realidad se trata de una situación bastante lamentable – tienen que ir al baño dentro de la “pichicera” si no quieren morir de frío, de una bola perdida, o dejar al descubierto su refugio. El polvo químico es su solución, pero se les acabó: “¡Cualquier cosa por un tarro de polvo químico aunque esté abierto y medio húmedo! Pero no hay” (60). En medio de tales condiciones deplorables, hay cierta humor que destaca la absurdidad de la guerra.

A lo largo de la novela suceden cosas absurdas, enfatizadas a través de las descripciones del autor. Por ejemplo, en el caso de la oveja que pisa sobre una mina: “¡Pac! Sucedió que abajo de la oveja había una mina y al rozarla ella se hizo como si el sol saliera, una luz fuertísima. En ese momento se la ve completa todavía en el aire, a la oveja. En el aire encoge las patas, levanta la cabeza y mira atrás retorciendo el cuello que se vuelve como de jirafa altanera y está volando alto en el aire ella y recién después revienta, justo cuando el humano escucha el ruido de la mina, esa explosión que la oveja bien debe haber oído primero. Recién entonces se empieza a deshacer la oveja: sigue la cabeza para un lado, una pata se va para el otro, un costillar con la lana chamuscada para el otro, y el lomo –la piel del lomo es lo que menos le quemó el fogonazo– queda liviana sin oveja, sigue flotando por el aire como un tapado sin dueño y tarda bastante más en volver a tocar el suelo que los otros pedazos de la oveja carneada en seco por una mina” (79).  A pesar de la tragedia que se presenta, el autor la cuenta con tal aridez y factibilidad que parece chistosa. Quizás sea la última arma que le queda al argentino ante el sin sentido de sus circunstancias.

 

Los Pichiciegos

Los Pichiciegos fue un libro interesante para mi. El punto de vista es de los soldados en sus misiones día a día. No se habla de las escenas o la situación fuera de las experiencias de estos soldados, los pichiciegos. Me gusta como se cuenta porque en vez de una idea general de lo sucedido para reconstruir esta historia, solo se ve al nivel personal, lo que viven los pichis cada día.

Una cosa que me llamo la atención de los pichis fue la actitud de ellos. Tienen una actitud muy ligera y hasta chistosa. La forma en que se hablan por ejemplo. Un dialogo super coloquial, y se destaca la confianza que hay entre todos ellos. Son como hermanos. Pues, no creo que les quedara otra opción mas q aceptar esta cercanía, dado que sufren diarrea juntos, cagan juntos, y se cuidan mutuamente cuando se enferma. Durante el libro no he visto mucho conflicto entre ellos mismos tampoco. Racionan la comida, los cigarrillos etc para preocupándose de que todos estén bien. Pero por otro lado, no toman la muerte de cada soldado con seriedad. Bueno, eso parece. Por ejemplo, el que tardó bastante tiempo sin morir, y nada mas se pasaba los días quejándose y quejándose de su dolor porque no podia moverse, ni comer, ni fumar. Pues al final cuando murió, todos estaban aliviados mas que tristes. Esto me pareció interesante pero imagino que en su caso, la muerte era una cosa esperada ya. Para referirme a lo que dije antes de su actitud ligera, otro ejemplo del muerte de su compañero es como trataron las quejas de el. Me pareció muy gracioso como empezaron todos a quejarse igual que el para no escucharlo mas y los otros que no entendían la estrategia se enojaban aun mas que no se callaran. Muy chistoso. Este es mi punto, han podido mantener cierto sentido de humor durante el libro, aunque estuvieran pasando los peores momentos.

Yo no me esperaba la muerte de casi todos. Ya me había encariñado con los personajes y mas bien la dinámica del grupo todos juntos. Hay un especie de ironía en la manera en que sobrevivió el ultimo y hasta eso me dio un poco de risa. Se levanto a orinarse y cuando volvió ya habían sido atacados todos. Gracias a sus ganas de orinarse, salió el único vivo de los pichis.

El titulo va muy bien con el contenido de la novela. Es una analogia perfecta para describir los soldados. Un colectivo de bichos que andan bajo la tierra y solo de noche. También la descripción de su vulnerabilidad en las manos de los británicos al ser descubiertos en un mal momento. Su situación es muy bien descrita, como el autor hace la narrativa cruda, muy creíble y real. Cosas reales que viven esos personajes que en una novela pintada bonita, no incluirían. Esto me gusta. Siempre me han gustado los libros que no se ahorran todo lo real, lo vulgar. Lo cuentan como fue sin torcer la verdad para agradar.

Los Pichiciegos

Los Pichiciegos fue un libro interesante para mi. El punto de vista es de los soldados en sus misiones día a día. No se habla de las escenas o la situación fuera de las experiencias de estos soldados, los pichiciegos. Me gusta como se cuenta porque en vez de una idea general de lo sucedido para reconstruir esta historia, solo se ve al nivel personal, lo que viven los pichis cada día.

Una cosa que me llamo la atención de los pichis fue la actitud de ellos. Tienen una actitud muy ligera y hasta chistosa. La forma en que se hablan por ejemplo. Un dialogo super coloquial, y se destaca la confianza que hay entre todos ellos. Son como hermanos. Pues, no creo que les quedara otra opción mas q aceptar esta cercanía, dado que sufren diarrea juntos, cagan juntos, y se cuidan mutuamente cuando se enferma. Durante el libro no he visto mucho conflicto entre ellos mismos tampoco. Racionan la comida, los cigarrillos etc para preocupándose de que todos estén bien. Pero por otro lado, no toman la muerte de cada soldado con seriedad. Bueno, eso parece. Por ejemplo, el que tardó bastante tiempo sin morir, y nada mas se pasaba los días quejándose y quejándose de su dolor porque no podia moverse, ni comer, ni fumar. Pues al final cuando murió, todos estaban aliviados mas que tristes. Esto me pareció interesante pero imagino que en su caso, la muerte era una cosa esperada ya. Para referirme a lo que dije antes de su actitud ligera, otro ejemplo del muerte de su compañero es como trataron las quejas de el. Me pareció muy gracioso como empezaron todos a quejarse igual que el para no escucharlo mas y los otros que no entendían la estrategia se enojaban aun mas que no se callaran. Muy chistoso. Este es mi punto, han podido mantener cierto sentido de humor durante el libro, aunque estuvieran pasando los peores momentos.

Yo no me esperaba la muerte de casi todos. Ya me había encariñado con los personajes y mas bien la dinámica del grupo todos juntos. Hay un especie de ironía en la manera en que sobrevivió el ultimo y hasta eso me dio un poco de risa. Se levanto a orinarse y cuando volvió ya habían sido atacados todos. Gracias a sus ganas de orinarse, salió el único vivo de los pichis.

El titulo va muy bien con el contenido de la novela. Es una analogia perfecta para describir los soldados. Un colectivo de bichos que andan bajo la tierra y solo de noche. También la descripción de su vulnerabilidad en las manos de los británicos al ser descubiertos en un mal momento. Su situación es muy bien descrita, como el autor hace la narrativa cruda, muy creíble y real. Cosas reales que viven esos personajes que en una novela pintada bonita, no incluirían. Esto me gusta. Siempre me han gustado los libros que no se ahorran todo lo real, lo vulgar. Lo cuentan como fue sin torcer la verdad para agradar.

Los pichiciegos

    Los pichiciegos escrito por Rodolfo Fogwill es una novela de ficción que habla principalmente sobre el grupo de los desertores argentinos (los pichiciegos) que viven dentro de una cueva durante la Guerra de Malvinas, es decir, la guerra luchó en 1982 entre Argentina y el Reino Unido por la disputa Falkland o (Malvinas) islas. Además, los desertores argentinos (los pichiciegos) son comercio de mercancías con los ejércitos argentinos y británicos, y también están construyendo el libre mercado despiadado durante el tiempo de guerra. Porque están tratando de sobrevivir a través del conflicto. En cuanto a mí, antes de leer esta novela, no tengo ni idea donde está la Isla Malvinas y también no sabe la Guerra de Malvinas. Por esta razón, es muy interesante leer esta novela, porque realmente aprendo el nuevo conocimiento y una historia de América Latina.

Para mí, he notado que hay muchas partes de esta novela se basan en la conversación entre los desertores argentinos. Es más, creo que el autor trata de iniciar la historia con la negación. Por ejemplo, la primera parte de la novela comienza con la frase, ¨Que no era así, le pareció¨ (pg. 9). Quizás el autor intenta mostrar a los lectores el lado oscuro de su característica. Pienso que hay un tema diferente para cada capítulo de la novela. Por ejemplo, en el Capítulo 2, el autor describe la ausencia de las imágenes de la Isla Malvinas. También en el Capítulo 3 de la novela, el autor centrarse en la dictadura Argentina. Además, las partes posterior de la novela muestran el impacto de la disputa de la Isla Malvinas durante un largo período de tiempo. Es más, en cuanto a mí, hay un pasaje que muestra el imperialismo a los lectores. Según el contexto en el Capítulo 7 de Los pichiciegos, ¨Los Reyes no rezaban, nadie rezaba. Casi nadie creía en Dios. Él dudaba: Viterbo decía no creer. El Turco seguro que no creía en nada y el Ingeniero, que era hijo de evangelistas, decía creer cuando sentía miedo; después no¨ (pg. 51).

Para concluir, creo que Los pichiciegos es una novela contiene la historia imaginaria de la gente subterránea que es el grupo de los desertores argentinos. Es más, esta novela también muestra las relaciones ambiguas entre la sociedad civil y la dictadura. Para mí, esta historia es difícil de entender, ya que no tengo ningún fondo de la Guerra de Malvinas. Pero, todavía aprendo algo de esta novela.