Este libro me interesó mucho porque se relaciona con una parte de la historia de mi familia. Durante la guerra civil en España, mi bisabuelo (y mi abuelo que tenia solamente 5 años) tenia que escapar a Argentina dado la posición política de mi bisabuelo, quien era un partidario del movimiento de autonomía en Galicia. Lamentablemente, no he podido terminar el libro debido a un mal caso del gripe, pero he podido observar y analizar algunos puntos de la literatura que me hizo reflexionar y pensar.
Primeramente, una cosa que me impresionó durante la obra es la claridad del lenguaje y la prosa rica que usa el autor para la narración, especialmente en las descripciones de la ciudad de Fez y el protagonista José Torres. Además, en sus narraciones sentí una presencia constante de la angustia como un tema que entrelaza estos relatos durante la Guerra Civil y los protagonistas, atrapados en el horror y la tragedia que viene con la guerra.
En la primera parte, “El mensaje”, podemos ver las tensiones entre los primos en un ambiente rural antes de la guerra, enfocándonos la personalidad del narrador que se hace humano a través de las palabras de Ayala. En mi opinión, el efecto que tiene en humanizar a sus personajes es que nos muestra el lado personal de las víctimas de la guerra, y que la perdida y dolor es un hecho que ocurrió con muchas familias – la guerra es una tragedia humana universal.
El segunda relato, “El tajo” se sitúa en la guerra civil. Mi personaje favorito era el general Santolalla, que forma parte del ejército nacional. A través de la historia, el autor nos muestra sus circunstancias y miedos – su lado humano, incluyendo la reflexión de su vida, iniciado por el asesinato de un miliciano joven. Por tanto, yo creo que el verdadero conflicto ocurrió en la conciencia de las protagonistas. Recorriendo los momentos de miedo y violencia de su historia personal, el general, pese a la victoria de su ejercito, no festeja su éxito, sino estaba abrumado con una sensación de vacío que dejan los remordimientos de la guerra.
Mi paso favorito de El Tajo:
“Lo había asesinado, sencillamente .. Cuando eso era obra ajena, a él lo dejaba perplejo, estupefacto, lo dejaba agarrotado de indignación; siendo propia, todavía encontraba disculpas, y se decía «en todo caso, era un enemigo…» Era un pobre chico -eso es lo que era-, tal vez un simple recluta que andaba por ahí casualmente […] «he asesinado a un semejante, a un hombre ni mejor ni peor que yo.»
En mi opinión, una palabra que representa este libro es “angustia”. En conclusión, más allá de un mensaje político, yo creo que la condición humana es también una tema principal, sobre lo que reflexiona en un tiempo de guerra (donde vemos los lados oscuros y virtuosos de los seres humanos), una situación donde todo se escala. Las reflexiones sobre la conciencia estaban presentes en prácticamente toda la obra. Tambien estaba el “vacío”, una sensación que acompaña todos los personajes, con el mensaje melancólico la falta de absolución por los actos inhumanos cometidos durante la guerra. Es la incomprensión ante unos hechos que golpean la vida humana y sitúa a nuestra conciencia, con el conocimiento que solo nosotros somos dueños de nuestros propios actos, y en fin, tenemos que tomar la responsabilidad.
Hola Agustin, me gustó como universalizaste el tema de la guerra en tu análisis. Más allá todavía de la familia a la que el texto hace referencia, creo que la guerra toca al fondo de la condición humana y deja grabada en nuestra psique esa “angustia” que propusiste como palabra representativa del cuento. Para mí, interpreto la imagen de la cabeza del cordero, “entre pegotes de grasa fría”, como metáfora de esa angustia que nos provoca indigestión ante la guerra…
🙂
Hola Sasha,
Gracias por tus comentarios. En mi opinion, las imagenes que usan Ayala sirven un proposito de representar las emociones y sentimientos que no podemos cuantificar or definir sucintamente en el estilo de un diccionario. La cabeza del cordero, entonces, sirve como un recuerdo feo del lado oscuro de la guerra que provoca el mal en los seres humanos y la memoria del dolor que persiste a traves de muchas generaciones. Mi abuelo todavia habla de su mejor amigo en España que él nunca volvió a ver después de ir a Argentina – ya la angustia de no saber que había pasado a su amigo durante la guerra.
Hola Mateo,
Me imagino que al analizar “La cabeza del cordero” encontraste resonancia con el pasado de tu familia. Es fascínate saber que al igual que la familia del protagonista, la tuya también haya pasado por circunstancias similares a él. Desde un punto de vista histórico es fascinante pero al mismo tiempo triste que tus abuelos hayan tenido que sufrir tanto así!
La división y análisis que haces sobre el tajo es muy interesante. Me gusta que te hayas centrado en el ambiente rural de la guerra civil dando a conocer como el narrador refleja características de su persona. También vale resaltar que te das cuenta como el autor describe a cada personaje y, de una forma similar, a las víctimas de la guerra.
Con respecto a “El tajo”, me gusto que hayas centrado en el General Santolalla y que también consideres que él es tu personaje favorito dado que ves en el su lado humano al descubierto y parte de su juventud. Es importante sacar conclusiones más allá de lo que se lee y creo que hiciste un buen trabajo al analizar a cada personaje y tratar de entender su conflicto interno que al final es lo que los lleva a actual tal y como lo hacen.
Para finalizar, al enfocarse en la palabra ‘angustia’ para describir y concluir lo que interpretas de este libro, ayuda a visualizar de una manera automática lo que, muy seguramente, el autor ha querido hacer con nosotros los lectores. Cada ser humano y mucho más los que han estado involucrados directamente con la guerra, somos portadores de sentimientos fuertes y muchos llevan un ‘vacío’ que de una manera u otra, espera llenar.
En general, me gustó mucho haber leído tu análisis. Que buena interpretación de todos los cuentos y del libro en general.
(A Propósito, espero ya te hayas mejorado de la gripe que te tuviste. ¡Sopa de pollo es la solución!)
Hola Mateo! Gracias por tu comentario en mi blog.
Me encantó la descripción de Fez y el protagonista también, especialmente la manera Ayala describe la belleza y el exotismo que me hizo muchas ganas de visitar Marruecos de la ciudad.
Su idea de la angustia que se ejecutan en todo el tema de las historias es muy convincente. El trauma de la profunda psique del protagonista después de la violencia crea la atmósfera del libro que me dio la impresión de vaga ansiedad y vacuidad.