Is Ollanta Humala an option?
On Friday, October 14, three Peruvian political analysts wrote opinion pieces analyzing Ollanta Humala’s rising support in the polls. Mirko Lauer, from La Republica, argued in Outsider con galones that rumours are circulating that Humala may have received US$80,000 in support from Venezuela’s President Hugo Chavez to assist him in his travels across the country. Diego Garcia-Sayan in El voto antisistema for El Comercio speculated about the possibility that Humala might capture the antisystemic vote. August Alvarez Rodrich in his Peru 21 editorial, Mamita Ollanta! argued that Humala’s support resides mainly outside Lima, in the Southern highlands.
Can Humala maintain his upward trend in the polls over the next 5 months?
Agenciaperu.com interviewed A. Alvarez Rodrich and Carlos Tafur on October 16. Alvarez Rodrich argued that he would not be surprised if the second electoral round is between Flores Nano and Humala
Análisis de Álvarez Rodrich y Tafur: “Segunda vuelta será entre Flores Nano y Humala”
Agenciaperu.com
16 de octubre del 2005
El director del diario Perú 21, Augusto Álvarez Rodrich, consideró que dados los resultados de la última encuesta de Apoyo, “no sorprendería que la segunda vuelta electoral sea entre Lourdes y Humala”.
La intención de voto según esta encuesta coloca a la lideresa de Unidad Nacional en primer lugar con el 27%, y en cuarto lugar al líder del Partido Nacionalista, Ollanta Humala.
Para Álvarez Rodrich, ”las encuestas sólo marcan tendencias”, sin embargo advirtió que la mejora de Humala y el descenso de los líderes del Apra y AP podrían generar una falta de centro ya que “Paniagua y Alan García comienzan a no generar entusiasmo”.
“Si no surge un reemplazo en ese centro, no sorprendería que la segunda vuelta sea entre Lourdes y Humala, lo que daría una imagen muy similar a la que se dio en 1990 entre Mario Vargas Llosa y Alberto Fujimori”, señaló.
Asimismo, Carlos Tafur, director del diario La Primera, basándose en la misma encuesta precisó que “si Lourdes Flores gana las elecciones, habría un congreso con el Apra como primera mayoría, con el fujimorismo y humanismo juntos teniendo 22% del Congreso y UN con el 11%”.
“¿Qué gobernabilidad habrá allí más allá de las posibilidades políticas de Lourdes Flores de manejarse en ese escenario?”, cuestionó.
En una conversación sostenida con La Ventana Indiscreta, ambos periodistas trataron de explicar el descenso en las encuestas de Valentín Paniagua, quien meses atrás ocupaba el primer lugar de la intención de voto.
Tafur consideró que “Paniagua ocupa la continuación de Toledo. Vivimos un gobierno de centro que no decide las cosas, es un gobierno q huele a llanta quemada”.
Asimismo, Álvarez Rodrich refirió que “a Paniagua le falta perfilar que quiere. Hay que agradecerle que nos dio una presidencia honesta, pero la gente no solo busca honestidad si no un gobierno que de resultados concretos, y allí falla porque no da un mensaje estimulante ni dice lo que quiere hacer”.
Sin embargo, coincidieron en que el proceso electoral del próximo año lo podría ganar Lourdes Flores Nano, Alan García o Valentín Paniagua. Refirieron que estos 3 líderes políticos “hicieron los contactos políticos, de manera que cualquiera que gane de los tres, van a buscar hacer un gobierno más viable”.
“Lo malo de ello es que al tratar de tranzar mucho nos va a salir un gobierno malaguoso, no va tener mucha forma (…) la buena noticia es que esto se va mantener sin un desenlace fuerte”, explicó el director de Perú.21.
Otro punto que destacaron fue la importancia de que el próximo gobernante del país debe realizar grandes reformas iniciando su periodo, de tipo económico, político y jurídico.
No sólo porque sin cambios internos el Perú se quedaría ante el acelerado desarrollo que se vive en el continente asiático, sino porque además se correría el riesgo de repetir la crisis que se vivió en 1992, año en que Alberto Fujimori disolvió el Congreso.
“TOLEDO ES UN HOLOGRAMA”
En cuanto al audio Olivera – Delgado Parker, Tafur señaló que éste “pone en evidencia que tenemos un presidente pintado en la pared, con incapacidad de resolver la crisis ministerial producida por la indecisión de Ferrero de firmar la resolución y de Olivera de querer firmar a toda costa”.
“Tenemos un presidente que es un holograma, no ha sido presidente estos años, y es la peor herencia política que le va a dejar al siguiente régimen”, manifestó.
Álvarez Rodrich a su vez añadió que el audio demuestra una vez más “que todos los días, los políticos, los congresistas –que son representantes de empresas privadas- quieren usar el Estado para su propio beneficio”.
“La calle está molesta, y lo que está ocurriendo es un ruido, una música de fondo que dice ‘estamos hartos de este país, de cómo se está manejando’”, argumentó.
Así fundamentó también que la semana pasada más de 200 peruanos optaran por irse a Irak a trabajar como personal de seguridad, sin garantías para su integridad, “lo más probable es que van a morir. La gente dispuesta a buscar cualquier cosa”.
“Tal vez este es un lugar más pacífico, pero con una desesperanza muy grande, con una falta de oportunidades evidente, y los políticos no van a hacer nada para arreglarlo”, lamentó.
An Outsider con galones
por: Mirko Lauer
La Republica
14 de octubre del 2005
Ollanta Humala está dedicado a hacer manifestaciones por el interior del país, en las que no le va del todo mal. Se habla de reuniones de hasta 5,000 personas en algunas ciudades. Una encuesta reciente que incluye zonas rurales le da casi 5% de intención de voto nacional y un impresionante 14% en varios departamentos del sur.
El mensaje de Humala sigue siendo el mismo nacionalismo mandón, pero sus perspectivas han cambiado. Todo indica que su entendimiento con los PCs Patria Roja y Unidad ya no va más, y que las buenas cifras han llevado al candidato etnocacerista a buscar socios más próximos a corrientes centrales de la política.
Un rumor sostiene que Humala ha recibido de Venezuela una primera ayuda de US$80,000 para la campaña, dólares que le están permitiendo recorrer el país. Con dinero o sin él, la afinidad con Hugo Chávez en ideología y estilo es real, y lo que podría estar haciendo la diferencia con las dos docenas de candidatos chicos.
Pero para algunos analistas de encuestas, la matriz de transferencia de votos hacia Humala ya está casi agotada, lo cual significa cero espacio para seguir creciendo. Pero con un electorado tan movedizo y dado a sorprender como el nuestro, eso tiene que ser tomado con un grano de sal, y el candidato está contando con eso.
Otra línea de análisis hace notar que el mensaje de Humala todavía no ha sido propiamente difundido, ni su imagen sometida realmente a los reflectores mediáticos. En consecuencia todavía no ha llegado a la encrucijada política que podrá lanzarlo o liquidarlo. También podría quedarse dando vueltas en un limbo sin encrucijada.
Una lectura de las hojas de coca sugiere que el futuro electoral de Humala depende de dos posibilidades: que el desagrado del público con las grandes ligas políticas lleve a buscar un radicalismo castigador, o que se despierte entre las mayorías un largo tiempo dormido sentimiento nacionalista.
Pero desde que se desinfló la Izquierda Unida el público peruano no ha revelado tendencias ni radicales ni nacionalistas. Incluso en IU fue hegemónica una izquierda moderada. El propio nacionalismo peruano parece ser más reactivo, frente a los vecinos, que afirmativo, y además pálido en ambas versiones.
Aun así, hoy Humala definitivamente es el candidato que más sorpresas puede dar. Su propia peripecia en el electoralismo militar es una novedad para el Perú, y pocos tienen más méritos para llevar la etiqueta de outsider. Si se logra calmar lo suficiente por el camino, seguramente animará mucho esta larga y todavía aburrida campaña electoral.
El voto antisistema
por: Diego García-Sayán, Ex canciller de la República
El Comercio
14 de octubre del 2005
“Un sector importante de los peruanos es y será impermeable a un discurso radical que puede evocar al accionar sanguinario del senderismo”
Parece difícil que el discurso chauvinista y racista del llamado “etnocacerismo” pueda convertirse en un factor de atracción tal que convierta a Humala en el ‘outsider’ sobre el que algunos especulan. No obstante, la erosión del sistema político genera ciertas amenazas. Una es la del voto antisistema. Que no sería sino la concreción en las urnas de la dinámica social contestataria expresada en las formas confrontativas de protesta que se han visto en los últimos tiempos.
El telón de fondo es el del debilitamiento del principio de autoridad democrática en los últimos lustros. Ello en una sociedad con 50% de pobres y en la que impera la exclusión social y étnica. En las entrañas del país existe disconformidad con el Perú oficial, ajeno a las expectativas de los pueblos. Pese a que esta es una realidad parecida a la de otros países de la región, eso no quiere decir que sea igual. Los liderazgos “radicales” tienen en el Perú una difusa base orgánica, que les resta vigor y proyección. Diferente es la situación de Evo Morales o de Felipe Quispe en Bolivia. Adicionalmente, un sector importante de los peruanos es y será impermeable a un discurso radical que puede evocar –queriéndolo o no– al accionar sanguinario del senderismo y sus secuelas. En términos políticos, además, se han dado en el Perú señales de madurez para respetar el calendario constitucional de renovación de autoridades y avanzar en concertaciones en un espacio como el Acuerdo Nacional.
Como todo en la dinámica política y social, lo que ocurra dependerá, sin embargo, de lo que el conjunto de actores políticos y sociales hagan. La capacidad de concertación y de diálogo democrático, en función de los temas nacionales, podrá ir revalorando el papel de la política y los políticos. O, en caso contrario, debilitarlo más. Dentro del marco de las 31 políticas de Estado ya fijadas en el Acuerdo Nacional, se debe precisar las metas por alcanzar en los próximos cinco años y cómo darles continuidad. Los temas son los obvios: calidad de la educación, salud pública, seguridad ciudadana, promoción de la inversión y lucha contra la corrupción.
Tengo la certeza de que un proceso político en el que la gente vea y sepa que es sobre asuntos que se debate, se cierra la capacidad de influencia de quienes quieren patear el tablero. Valentín Paniagua ya ha marcado una ruta en esa dirección y lo propio se podría decir de Alan García con su apertura a los diálogos políticos. Se trata de perseverar en esa dirección y de que todos los actores democráticos se sumen a ese cauce de construcción y concertación. No se puede inventar la rueda de nuevo.
Mamita Ollanta!: Las perspectivas electorales de Humala.
por: Augusto Alvarez Rodrich
Peru.21
14 de octubre del 2005
Ollanta Humala no ha llegado a las primeras planas y, más allá de unas pocas entrevistas en la televisión, todavía no alcanza una presencia mediática relevante. Tampoco parece muy interesado, por el momento, en conseguirla.
Las pocas notas de prensa que llegan a las redacciones dan cuenta de que su actividad proselitista se concentra en mítines en diversos puntos del país, congregando en varios de ellos a una concurrencia que no es despreciable.
Su ubicación en las encuestas lo colocan a media tabla, debajo del grupo que lidera la carrera -Lourdes Flores, Alan García y Valentín Paniagua- y cerca de Alberto Andrade. Sin embargo, a diferencia de este, que ya está dentro del frente liderado por Acción Popular, Humala sí podría convertirse en candidato presidencial.
En la encuesta capitalina de la Universidad de Lima, hecha en setiembre, Humala obtuvo 4,9%, con los mejores registros en el nivel socioeconómico D (7,9%) y entre los hombres (7,7%).
A su vez, en la encuesta nacional de agosto de Apoyo, Humala alcanzó un 7%. Sus mejores indicadores regionales están en la sierra sur (16%), Arequipa y costa sur (15%) y la sierra central (11%). No le va bien, en cambio, en la costa norte (2%), en la selva (4%), en la sierra norte (4%) y en Lima (3%). La zona de su alzamiento del año 2000 debe ser el factor que explica estos resultados.
Si en algún momento de fin de año Humala llegara a pasar el 10%, su candidatura podría llegar a tomar la forma de una bola de nieve que se vaya ensanchando.
En este sentido, la gran interrogante es si Ollanta Humala podrá seguir creciendo. A favor suyo está el hecho de que él puede encarnar, con más facilidad que el resto de candidatos, el sentimiento de fuerte crítica hacia el ‘elenco estable’ de la política peruana, el cual se encuentra en un franco proceso de deterioro ante el elector.
Sin embargo, en contra de su candidatura está, además de la asociación negativa con su hermano, el carecer hasta el momento de una plataforma electoral y, también, de un mensaje que vaya más allá de un velasquismo trasnochado y antisistémico.