Peru Election 2006

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Interview with Ricardo Portocarrero (Historian)

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Quieren demostrar que el rival es peor
Por Por Emilio Camacho
La República, 02 de junio del 2006

Entrevista a Ricardo Portocarrero
• Historiador y profesor universitario, Ricardo Portocarrero advierte que el principal problema de ambos candidatos es que la población no ha podido distinguir sus propuestas
• Por eso, afirma, se han dedicado al golpe bajo, a los psicosociales y la denuncia mediática.
– ¿Es real la influencia de caudillos regionales, como Hugo Chávez o Evo Morales, en los resultados de esta elección?
– Sí. En primer lugar, hay que señalar que el caudillaje es un fenómeno muy latinoamericano y en segundo lugar, las decisiones que se toman en un país siempre han tenido implicancias en los países vecinos. Es más, pueden convertirse en modelos a seguir.
– ¿García y Humala son caudillos o la gente que los respalda vota por el proyecto político que tienen detrás?
– El caudillaje es un fenómeno que aparece en momentos de crisis política, donde, a falta de proyectos diferenciables, la gente busca a líderes representativos. En ese sentido el aprismo tiene al caudillaje como expresión de liderazgo. Primero con Haya de la Torre y luego con Alan García. El caso de Humala responde, en cambio, al caudillaje de tipo militar. Se puede hacer con él un paralelo con la figura de Luis Sánchez Cerro.
– ¿Pero por qué tenemos este problema y no votamos por propuestas sólidas, donde no predomine la figura del candidato?
– El problema de fondo es la falta de sólidas tradiciones políticas. Hasta los 80 había tres grandes tradiciones políticas: el socialcristianismo, el Apra, y el socialismo en general. Pero la tendencia ahora es a la fragmentación, lo que lleva a la crisis de representación. Por eso, a pesar de que los partidos que han entrado al Congreso se han agredido a muerte, si no forman alianzas o no hay negociaciones, difícilmente tendremos un gobierno estable.
Crisis programática
– Lo curioso es que el Apra y el partido de Humala coinciden en muchas propuestas, pero se acusan mutuamente hasta llegar a la violencia.
– Lo que pasa es que hay una crisis programática muy fuerte. En la práctica lo que se impone es el modelo neoliberal. Con matices, ambas fuerzas proponen cambios en este modelo, pero no una verdadera alternativa. Ni siquiera Evo Morales propone cambios al sistema, sino mejores condiciones para el estado boliviano pero dentro de este sistema.
– ¿Pasa lo mismo con Hugo Chávez que se pinta como el líder antisistema en la región?
– El señor Chávez con todo su radicalismo y verborrea en el fondo vende su petróleo a EEUU en muy buenas condiciones.
– Hay alguna contribución valiosa del Apra o UPP al debate político o programático?
– Es difícil decirlo. La crisis programática se expresa en que ambos partidos no pueden distinguirse en términos de propuesta. No hay manera. Por eso la gente que va a votar por García o por Humala se refuerza en la idea de que su candidato sí quiere cambiar las cosas.
– ¿Y ante esa imposibilidad de distinguir que usted señala, los partidarios del Apra y UPP han recurrido al golpe bajo y las denuncias?
– Así es. Ante la imposibilidad de distinguirse, lo único que les queda es demostrar que su rival es peor. El mismo Alan García lo ha reconocido hace poco.
Exclusión en el debate
– Alan García ha dicho que es el mal menor.
– Claro. Pero no importa tanto que a uno se le acuse de provocar la muerte de 30 y al otro la de 300. Lo que realmente importa es si alguno garantiza la defensa de los derechos humanos.
– Ud. dice que la crisis programática alienta el caudillaje. ¿Por eso el debate no ha sido sobre propuestas, sino sobre la trayectoria de ambos candidatos?
– Sin duda. El caudillaje es un fenómeno social que no existe sin la adhesión reverente de las masas. Existe en sistemas políticos que se caracterizan por su extrema debilidad, como el nuestro.
– La exclusión ha sido mencionada por ambos candidatos, ¿se convertirá en uno de los principales temas de la nueva agenda política?
– El tema de fondo en el Perú es la exclusión. La exclusión, la discriminación y el racismo son las bases culturales que han servido para hacer del Perú un país donde hay una minoría que concentra la riqueza, y otra mayoría que es pobre. Pero una cosa es que entre al debate y otra es que se haga algo al respecto a partir del 28 de julio.
“Nuevos partidos se forman a partir del clientelismo”
– ¿Esta última elección va a dejar acentuada la polarización que ya existe entre Lima y provincias?
– Yo creo que hay una serie de discursos de origen provinciano que acusan a Lima de explotar a las provincias. Lo cierto es que no se toma en cuenta que el 52% de la población de Lima nació fuera de Lima. Además, hay una gran presencia de provincianos en el gobierno. Entonces por qué existe esta denuncia de las provincias contra Lima. Yo creo que esto es una herencia del gamonalismo andino, que utilizaba el discurso antilimeño para justificar su propio esquema de dominación local.
– ¿Y este esquema de figuras que defienden su cuota de poder local alimentando prejuicios y odios regionales se repetirá en el nuevo Congreso?
– Pero esto ocurre siempre. Los nuevos partidos políticos se construyen a partir de las relaciones clientelares que establece un personaje presidenciable con otros personajes regionales. La clave aquí son las redes clientelares de intereses particulares.
– A partir de los resultados de las elecciones hay quienes temen que en algunas zonas del país, como el sur aymara, levante banderas separatistas. ¿Cree que esto es posible?
– Personalmente no lo creo. A pesar de los momentos terribles de nuestra historia, el Perú siempre se ha mantenido unido. El modelo político basado en la federación de estados nunca ha tenido mucho peso en el Perú, se le ha descartado de la misma manera que al modelo monárquico. Las fronteras nacionales han marcado muy fuerte.

Written by Michael Ha

June 2nd, 2006 at 6:02 am

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