Who Vandalized the Files on Humala’s Military Record?
The Ministry of Defense, after weeks of stonewalling about Ollanta Humala’s military record, now acknowledges that its files on Humala have been vandalized. The material on the key periods of interest to the public (including 1992 when Humala was in Madre Mia) are gone. Calls for the Minister of Defense Marciano Rengifo’s resignation are intensifying.
Qué informes se robaron y por qué
Edmundo Cruz.
Unidad de Investigación
La Republica
02 de marzo del 2006, pp. 14-15.
La sustracción de tres informes del legajo militar del comandante EP (r) Ollanta Humala Tasso, confirmada por un comunicado del propio Ministerio de Defensa, es una falta grave. Se trata de documentos clasificados, de carácter confidencial, cuya apropiación es tipificada por el Código de Justicia Militar como delito de infidencia.
Los materiales hurtados son denominados formalmente “Informes de Eficiencia del Oficial” (IEO) y son emitidos anualmente por los jefes inmediatos de cada oficial.
Cada informe IEO contiene la calificación de cada efectivo durante los 365 días del año, discernida en unos diez aspectos, desde aptitud física y militar, hasta potencialidad y proyección profesional, pasando por el rendimiento, antecedentes, técnica y táctica, responsabilidad e incluso puntualidad.
La evaluación es numérica, pero debe ser sustentada, sobre todo cuando el calificativo es sobresaliente. Este debe ser argumentado y documentado con las acciones u operativos que lo justifican. Inclusive se anexan copias de partes, fotos, etc.
En el caso de Ollanta Humala, su legajo debe contener por lo menos veintiún informes IEO, correspondientes a sus años en servicio activo, de 1984 al 2004.
Extrañamente, de todos éstos años, sólo se han sustraído tres: los que corresponden a 1992, 1999 y 2002.
¿Por qué? ¿Quiénes los redactaron y qué contenían?
Informe IEO 1992
En este año, los encargados de emitir el informe IEO fueros sus jefes inmediatos: el mayor Jorge Flores Tello, oficial ejecutivo del Batallón Contrasubversivo BCS 313, con sede en Tingo María; y el jefe máximo de esa gran unidad, el entonces comandante Benigno Leonel Cabrera Pino.
El primero de ellos, Jorge Flores, fue el oficial que en una declaración revelada por este diario (edición del 5 de febrero último) identificó a Ollanta Humala Tasso como el capitán “Carlos”, jefe de la Base Contrasubversiva BACs Madre Mía. La declaración fue rendida en un proceso investigativo de ese batallón.
Benigno Cabrera y Jorge Flores debieron calificar a Ollanta Humala en un año tenso como fue 1992. Año en el que la jurisdicción del BCS 313 fue escenario, y su personal protagonista, de eventos relacionados con la lucha antisubversiva y antinarcóticos. Denuncias recientes relacionadas con esos aspectos, a propósito de la candidatura de Humala, tornan suspicaz la desaparición del informe de eficiencia de ese período crucial.
Informes IEO 1999
En 1999, se emitieron dos informes IEO para el legajo de Humala. Uno suscrito por el comandante Rafael La Rosa Guevara, oficial G-2 (inteligencia) de la 31º División de Infantería (Huancayo), del cual Ollanta Humala era auxiliar.
Este informe debe despejar serias dudas relacionadas con la pérdida de dinero de las mochilas de Oscar Ramírez Durand (a) “Feliciano” (US$ 1,800) y de su compañera “Bertha” o “Blanca” (US$ 5,000). Ocurrió cuando fueron detenidos y las prendas quedaron bajo custodia de la sección de Inteligencia (G-2) a cargo de La Rosa y Humala.
“Feliciano” fue detenido el 14 de julio de 1999, y de inmediato la 31º División inició una investigación. Concluida ésta, Humala fue trasladado a Arequipa, en agosto, a pedido expreso del jefe de la Tercera Región Militar, general Abraham Cano Angulo, y con el respaldo del comandante general del Ejército, José Villanueva Ruesta.
Humala, Cano y Villanueva, son artilleros. Estos dos últimos miembros de la Promoción 1966, más conocida como “promoción Montesinos”. Lo curioso es que el cambio de Humala a Arequipa se “regularizó” con fecha primero de julio de ese año, como si éste no hubiera estado en Huancayo, cuando se produjo la captura de “Feliciano”.
En Arequipa, Ollanta Humala formó parte del Estado Mayor y su informe de eficiencia de este segundo semestre lo suscribió el general Abraham Cano Angulo, el mismo que había solicitado su cambio. El calificativo fue sobresaliente y sería interesante conocer la fundamentación, pero este IEO ha sido sustraído.
También resultaría interesante conocer el informe IEO del 2002, firmado por el general Luis Muñoz Díaz, cuando era jefe de Personal y Ollanta Humala lo desconoció en una carta enviada desde París, donde era agregado militar.
Claves
LA LEY. El Código de Justicia Militar señala que incurren en delito de infidencia los que “proporcionan documentos, información o datos de que se tenga conocimiento por razón de empleo y que estén obligados a mantener en reserva”.
LA SANCIÓN. El mismo código precisa que se aplica la pena “a quienes comuniquen o divulguen por cualquier medio, sin autorización, el contenido de algún documento militar y de carácter secreto”. El IEO lo es.
Antecedentes
1992 estuvo en Madre Mía, en 1999 en Huancayo y en 2002 en París, como agregado militar del Perú.
Defensa citará a Ollanta Humala
En medio de críticas y pedidos de su renuncia, el ministro de Defensa, Marciano Rengifo Ruíz, anunció que la Inspectoría General del Ejército (IGP) investigará el robo de los tres informes del legajo de Ollanta Humala.
Inspectoría citará como testigo a Humala para que reporte sobre los documentos que tiene en su poder.
En la víspera, el candidato nacionalista afirmó que tenía “copia” de sus Informes de Eficiencia del Oficial (IEO), lo que llama la atención porque se trata de un documento clasificado, y no debería tener en su poder duplicados.
Rengifo por su parte indicó que “no tenía idea” de por qué desaparecieron los IEO de Ollanta Humala, y aclaró que no es su propósito ocultar información sobre la actuación de Humala cuando trabajó en Madre Mía con el seudónimo de capitán “Carlos”.
Mientras, varios sectores políticos pidieron la dimisión de Rengifo. Y el Consejo Nacional de la Magistratura reclamó drástica sanción para los responsables de la destrucción de los documentos de Humala.