Peru Election 2006

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Victor Andres Garcia Belaunde, Congressional candidate for Frente de Centro, and Alberto Moreno, presidential candidate for Movimiento Nueva Izquierda, see some basis for Ollanta Humala’s claim that Lourdes Flores, should she be elected, would not last a year, if current economic policies continue under her rule. Ulises, brother of Ollanta Humala and presidential candidate for Avanza Pais, claims that a governemnt led by his brother would not last a year and predict a fall similar to Lucio Gutierrez in Ecuador. Mirko Lauer analyzes the potential for political instability under governments led by Flores and Humala.


Plaza de Armas
Peru.21, 6 de abril del 2006

VATICINA REACCIÓN POPULAR CONTRA LOURDES
Coincide con Humala
El presidente de Acción Popular, Víctor Andrés García Belaunde, coincidió con Ollanta Humala en que un eventual gobierno de Lourdes Flores que continúe la política económica que se aplica desde hace 15 años no completaría su período de cinco años. El también aspirante al Congreso consideró que, “si sale quien representa a la derecha”, existe el peligro de un levantamiento popular como el que hubo en Bolivia con Gonzalo Sánchez de Lozada y que lo sacó del poder.
Patria Roja apoya una revuelta contra Lourdes
Expreso, 6 de abril del 2006

El Partido Comunista del Perú “Patria Roja”, marxista leninista maoísta, respaldó ayer la amenaza del ultranacionalista Ollanta Humala de desatar una revuelta callejera para derrocar a Lourdes Flores Nano, si ésta gana las elecciones presidenciales del domingo.
El respaldo de Patria Roja se dio en un contexto en el que los Humala han iniciado tratos secretos con la izquierda marxista de todas las corrientes en busca de apoyo para evitar una derrota en la segunda vuelta de las elecciones.
Alberto Moreno, líder máximo de Patria Roja, que participa en la campaña con el membrete de Nueva Izquierda, aliada de los comunistas ex moscovitas, sostuvo que “la posibilidad de que Lourdes Flores pueda ser sacada del poder antes del primer año de un eventual gobierno se produciría porque estallaría un clima de violencia social, debido a que el pueblo está harto del modelo económico que propugna”.
Moreno trató de justificar la “advertencia” al afirmar que “si Lourdes Flores es obligada a abandonar el poder, como lo hicieron varios presidentes latinoamericanos, no significaría una amenaza cumplida del candidato Ollanta Humala”.
“La persistencia de un modelo que atenta contra el derecho a las ocho horas de trabajo, que ensancha la brecha social entre ricos y pobres, y que satisface los apetitos de las grandes empresas que tiene todo tipo de gollerías tributarias, definitivamente implica echarle más leña al fuego”, agregó.
Negó, no obstante, que Humala y Patria Roja estén incentivando a la revuelta insurreccional con sus declaraciones.
“No es una amenaza para crear el caos, ni de levantamiento en contra del sistema llamado democrático, es una posibilidad real”, añadió Moreno, quien cerrará hoy su campaña electoral en el Cusco.

Ulises: “El pueblo sacará a mi hermano”
La Primera, 6 de abril del 2006
No renunciará a su candidatura presidencial para apoyar a Ollanta. Al contrario, Ulises Humala le dio la espalda a su hermano más famoso y aseguró que, de llegar a Palacio, el candidato nacionalista sería sacado por la población.
“Al que sacará el pueblo es a Ollanta y terminará igual que Lucio Gutiérrez. Tendrá que enfrentar una rebelión en las calles porque no podrá cumplir lo que anunció al inicio de campaña”, sostuvo.
Se refirió puntualmente al cambio de discurso de Humala Tasso sobre la suerte del Parlamento, al recordar que en un inicio habló de disolver el Congreso que resulte elegido –tras la instalación de la Asamblea Constituyente–, pero después varió su posición ante la presión de sus “candidatos oportunistas”.
“Está rodeado de congresistas oportunistas; su entorno es montesinista. La única forma que tendría Ollanta de aplicar su plan sería disolviendo el Congreso”, afirmó.
Ni la mano firme es tan firme, ni la mano dura dura mucho
Por Mirko Lauer
La República, 6 de abril del 2006

“No es la intención prejuzgar la conducta de Humala en el poder, sino aportar un elemento de juicio adicional a ese posible panorama”.
Alentado por la munición gruesa que flota en estas últimas 72 horas de la campaña, ha reaparecido el tema de la estabilidad de los gobiernos elegidos en la región andina. Este tema persiguió a Alejandro Toledo a lo largo de su mandato, y ahora empieza a rondar al próximo presidente del Perú, aun antes de haber sido elegido.
Ollanta Humala pinta el panorama de un gobierno de Unidad Nacional derrocado por las masas al año de haber llegado, en el molde de lo sucedido en Bolivia y Ecuador. No da mayores explicaciones, pero debemos pensar que su ataque a Lourdes Flores solo puede corresponder a que la prefiere como contrincante en la segunda vuelta.
Pero como nos recuerda el politólogo Alfred Stepan, una mentalidad en que el ganador alza con todo ha hecho a las dictaduras militares de América Latina por lo menos tan frágiles como sus democracias. Si Humala cree que está representando alguna forma de estabilidad y duración, debería volver a pensarlo.
Hace no mucho el colega Lucio Gutiérrez fue sacado a marchas forzadas de la presidencia, y lo que ha salvado a Hugo Chávez de caer por el mismo método es sobre todo el petróleo. Aquí el asimilado Alberto Fujimori y su carnal Vladimiro Montesinos cayeron como paltas al suelo, con virtualmente toda la Fuerza Armada detrás.
Que un gobierno de Unidad Nacional puede heredar una cuota ampliada de la inestabilidad política de Toledo es una fuerte probabilidad. Pero si algo significan las documentadas revelaciones que viene haciendo este diario sobre el entorno montesinista de Humala, las perspectivas de un gobierno UPP-PNP no parecen mucho mejores.
Durante estos cinco años de democracia importantes sectores de la población se han movilizado contra el gobierno por una variada gama de reclamos. Pero a pesar del descontento que ella padece en las encuestas, nadie que se sepa ha salido a las calles contra la democracia. Más bien la han usado para llevar adelante sus protestas.
En cambio los regímenes autoritarios, no se diga ya las dictaduras, sí han sido criticados por masas políticas movilizadas en las calles, que en estos tiempos siempre terminan ganando. No es la intención prejuzgar la conducta de Humala en el poder, sino aportar un elemento de juicio adicional a ese posible panorama.
Lo que más debilitó a Toledo no fue su respeto a la democracia sino la intensa campaña periodística acerca de la corrupción –atribuida o real– de miembros de su entorno. Asimismo lo que demolió el prestigio que le quedaba al Congreso no fue su mala ejecutoria, sino el tufo a corrupción que el país percibió en sus privilegios.

Written by Michael Ha

April 6th, 2006 at 7:15 am

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