A algunos de ustedes posiblamente les interesen este articulo de El País sobre Walsh. Está enfocado en su ultima obra y el proceso de reconstruirlo después de su desaparición.
Monthly Archives: March 2017
La Muerte y la Doncella por Dorfman
La obra de Dorfman me recuerdo mucho de la película argentina “el secreto de sus ojos” no solo por ser situado en el cono sur y por tratar con las dictadura militares de por allí.
Como dice Wiesel en su introducción, en esta obra tenemos un personaje quien le ha convertido en aspecto de su carácter una trauma grave.
En este sentido las obras son relacionados porque tiene un enfoque en lo que viene después de una trauma (nacional y personal), no en el momento preciso en que la pasó. Este enfoque también diferencia a la obra del genero del testimonio, por lo menos a mi parece así. Ademas, es una obra de ficción, que no cuente entre dicho genero.
Entonces, aunque no es testimonio las obras así pueden tener papeles importantes en el recuperación después de grandes traumas, esto no niego.
La pregunta que me quedo con no es si es una buena obra o no, si sea importante al proceso de paz y justicia en Chile o no, la pregunta que llevo es como debemos relacionar una obra como esta con la “política de la verdad”, porque ya es obvio que no lo es verdad.
No me entiendo muy bien como se debe situarlo en relación a las demás obras que hemos visto, tampoco como relacionar obras como esta o “El Hablador” con el genero de testimonio. Es un gran cambio mover a las obras de teatro desde obras de investigación como los de Walsh o Barnet, y realmente me está costando adivinar las enlaces y elementos comunes entre las primeras y ultimas obras de nuestro curso.
La muerte y la doncella
La muerte y la doncella se trata de una situación en que no tenemos evidencia suficiente para cualquier lado, y solamente podemos trabajar con lo que nos dicen nuestros emociones. Como Rashomon, el clásico del cine de Akira Kurosawa, o la persa película más moderna A Separation, tenemos que examinar más allá de lo que nos dice la ley hacia un mundo en que la verdad y la realidad no tienen una relación tan definida – no siempre están de acuerdo aunque, según la ley, deberían. Los cicatrizes de esta obra son los dejado por una tortura y violación durante la dictadura de Pinochet en Chile (ostensiblemente, y es relevante para cualquier país con circunstancias así), y aunque simpatizamos con la reacción de Paulina mientras encuentra su violador – según ella – también simpatizamos con los demás. Simpatizamos con su esposo Gerardo, cuyo interés es seguir adelante y cuya involucramiento en la historia vuela más y más fuera de su control. Nuestras emociones quieren que castiguemos a Roberto, pero nuestras consciencias saben que el vigilantismo y asesinato extrajudicial no son las respuestas correctas con tan poco evidencia. Sabemos como actuar legalmente, pero no sabemos como se siente Paulina después de años de sufrimiento y paranoia. Podemos decir seguramente que no actuaríamos igual dado sus circunstancias?
Estos son los cicatrices que sobreviven después de la dictadura y que no simplemente se sanan por la noche cuando vuelve la democracia. Ariel Dorfman no nos da una solución fácil ni un final feliz, creo yo, porque no existe, ni para Chile ni cualquier país. Es difícil sufrir sólo, pero la necesidad de tener una comisión legal que investigue los abusos de los derechos humanos habla de una trauma colectiva o social. Gerardo y Paulina quieren la misma cose – sanar – pero aún así sus métodos y experiencias están en conflicto.¿Cómo puede seguir adelante la sociedad cuando cada una de su gente sufre de su propia manera?
La muerte y la doncella
La muerte y la doncella se trata de una situación en que no tenemos evidencia suficiente para cualquier lado, y solamente podemos trabajar con lo que nos dicen nuestros emociones. Como Rashomon, el clásico del cine de Akira Kurosawa, o la persa película más moderna A Separation, tenemos que examinar más allá de lo que nos dice la ley hacia un mundo en que la verdad y la realidad no tienen una relación tan definida – no siempre están de acuerdo aunque, según la ley, deberían. Los cicatrizes de esta obra son los dejado por una tortura y violación durante la dictadura de Pinochet en Chile (ostensiblemente, y es relevante para cualquier país con circunstancias así), y aunque simpatizamos con la reacción de Paulina mientras encuentra su violador – según ella – también simpatizamos con los demás. Simpatizamos con su esposo Gerardo, cuyo interés es seguir adelante y cuya involucramiento en la historia vuela más y más fuera de su control. Nuestras emociones quieren que castiguemos a Roberto, pero nuestras consciencias saben que el vigilantismo y asesinato extrajudicial no son las respuestas correctas con tan poco evidencia. Sabemos como actuar legalmente, pero no sabemos como se siente Paulina después de años de sufrimiento y paranoia. Podemos decir seguramente que no actuaríamos igual dado sus circunstancias?
Estos son los cicatrices que sobreviven después de la dictadura y que no simplemente se sanan por la noche cuando vuelve la democracia. Ariel Dorfman no nos da una solución fácil ni un final feliz, creo yo, porque no existe, ni para Chile ni cualquier país. Es difícil sufrir sólo, pero la necesidad de tener una comisión legal que investigue los abusos de los derechos humanos habla de una trauma colectiva o social. Gerardo y Paulina quieren la misma cose – sanar – pero aún así sus métodos y experiencias están en conflicto.¿Cómo puede seguir adelante la sociedad cuando cada una de su gente sufre de su propia manera?
SPAN 495, Ideas y Comentarios Sobre La Verdad 2017-03-21 12:05:00
La muerte y la doncella
Esta obra, que es una obra de teatro escrita por Ariel Dorfman, nos trae a un escenario dentro de un pais que esta sufriendo grandes cambios politicos, como los varios otros paises de latinoamerica que tambien vieron grandes cambios y movimientos politicos durante esta epoca. En esta obra, el pais de enfoque es ‘Chile’ (puede ser cualquer pais), que esta tratando de transicionar su gobierno desde una situacion de dictadura hacia un gobierno democratico. Aqui, un personaje es Paulina, que en el pasado ha sido una victima de tortura y violaciones por los opresores. Su marido, Gerardo, es involucrado con la resistencia de el regimen opresor, tambien tiene gran importancia en la manera que la obra se desvela. El es traido a casa por un hombre, un medico, quien ella reconoce por su voz como el hombre que la torturaba. Durante toda la obra, el enfoque es el testimonio de todos estos eventos. Ella intenta vengarse y intenta forzar al medico a que confiese la verdad, utilizando a su marido para lograrlo, intentando grabar una confesión. Aqui, Gerardo piensa que la mejor manera de resolver sus problemas y la injusticia que ella sufrio es a traves del testimonio y la ley, pero su esposa quiere resolverlo con sus propias manos. Pero, a traves de toda la obra, los testimonios y la verdad sobre lo que actualmente paso con Miranda nunca es muy claro. El lector puede inferir que Miranda si era el doctor torturador que amenazo a tantas personas, pero el fin del libro muy ambiguo nos deja pensando si hay otras posibilidades. Yo creo que la funcion de la obra es intentar mostrar una obra que aunque sea ficcion, incluye eventos que por su puesto pudieron ser vistos durantes las revoluciones de latinoamerica. Y por causa de esto, el autor intenta provocar una sensacion de introspeccion, sobre que debe pasar con los participantes de las injusticias y los que cometieron estas injusticias.
La muerte y la doncella
La muerte y la doncella es una obra escrita por Ariel Dorfman que se hizo una película que fue vista por todo el mundo. La obra tiene lugar en un país supuestamente en latinoamericano, al final de una dictadura. Se trata de la historia de Paulina y su esposo Gerardo. En el pasado, Paulina fue secuestrada, torturada y violada por hombres de la dictadura. Una noche, un hombre que se llama Roberto viene a su casa para hablar con su esposo Gerardo. Cuando Paulina ve a Roberto, reconoce su voz y su olor y sabe que es unos de los hombres que la llevaron a ser torturada. Paulina está convencida de que es uno de los hombres que la secuestraron y quiere venganza por lo que pasó. Pero ¿es él realmente el hombre que la torturó? ¿O es sólo su imaginación? Esto es lo que el lector se pregunta durante toda la obra. Paulina atrapa a Roberto en la casa para hacer su venganza. Pero Gerardo convence a Roberto a confesar para detener la locura de Paulina. Si Roberto confiesa, Paulina lo dejará libre. A lo largo de la obra hay misterio e incertidumbre. E incluso al final no sabemos que pasó con Roberto. Al final aún no sabemos si es culpable o si es la paranoia de Paulina. Para mi, Paulina representa la gente oprimida por parte de las dictaduras. Su historia muestra las violaciones de los derechos humanos por parte de los regímenes totalitarios. También esta obra muestra el poder de las dictaduras sobre su gente y su falta de una conciencia social. Otro tema es la falta de justicia para los que fueron abusados por el gobierno. En el personaje de Paulina vemos el tema de la venganza y los efectos psicológicos de la tortura y del maltrato. Finalmente, esta obra nos muestra que a veces no podemos saber la verdad.
La muerte y la doncella
Esta es una obra de teatro escrita por Ariel Dorfman. La historia está ambientada en el presente, en Chile, pero puede ser cualquier país que acaba de terminar los años de la dictadura. Los tres personajes principales son: Paulina, quien fue capturada y violada durante la dictadura; su esposo Gerardo, quien ha sido seleccionado como miembro de la Comisión; y Roberto, un médico que estaba involucrado en torturar a los capturados y es la persona que violó a Paulina. De regreso de la visita al Presidente, Gerardo tiene problemas con su automovile y ayudado por Roberto. Roberto reconoce el nombre de Gerardo de la radio y regresa a su casa para celebrarlo. Por la mañana, Roberto se encuentra atado y allí está Paulina con un revólver. Esta vez, salvado por Gerardo, Roberto tiene la oportunidad de salir vivo de la casa si confiesa lo que le había hecho a Paulina. Frente a la grabadora, cada uno de ellos dice sus partes y hace que Roberto lo escriba y lo firme como si estuviera en el tribunal. Paulina envía lejos a su marido y toca la música de Schubert como hizo Roberto y decide matarlo. Sin embargo, en la última escena, Roberto sigue vivo. A lo largo de la historia, se me ocurrió las preguntas. ¿Cómo está tan segura de que fue Roberto quien la torturó? ¿Podría la música de Schubert ser una coincidencia? También, es una ironía que Gerardo defienda a la persona que podría haber sido la persona que violó a su esposa. Y es triste que como los sufrimientos de Paulina fueron ignorados para “reconciliar la paz en el país”. Creo que la autora presenta bien los problemas y sacrificios de la sociedad que está en la transición a la democracia.
La Muerte y la Doncella
Algo muy básico que diré es que la palabra testimonio es mencionado varias veces durante la obra. Gerardo piensa firmemente durante la obra que la mejor manera de resolver el caso de Paulina es agarrando diferentes testimonios y que la ley se encargue de resolverlo. Por otro lado la noción de la justicia se encuentra en la obra por el trabajo de abogacía de uno de los protagonistas. Más importante es el hecho que Paulina busca hacer su propia justicia sobre el doctor Miranda buscando grabar una confesión. Paulina quiere tomar el asunto de Miranda en sus propias manos mientras que su esposo Gerardo quiere que el problema se resuelva en manos de la ley. Esta es la tensión en que se encuentran los protagonistas y los sujetos cuando capturan a Miranda. La noción de la verdad es ambigua durante la obra. Por ejemplo al final uno no sabe en realidad que pasa con Miranda y sobre su confesión. En mi propia opinión creo que la obra hace bastante obvio que Miranda si fue el doctor torturador. Pero por el final ambiguo que tiene la obra creo que ese no es el punto de la obra. Si no en realidad el punto de la obra es mostrar una víctima de una dictadura represiva. Al comienzo de la obra el lector es informado que la acción toma lugar en chile, o un lugar que está en pleno transformación hacia la democracia. En la obra la víctima es Paulina. Lo primero que sabemos de Paulina es que es paranoica porque saca un revolver al ver llegar un carro a la casa. Aunque luego sabemos que su paranoia es justificada porque fue torturada y violada hacia 15 años. Toda la obra revuelve sobre el trauma sufrido por paulina cuando fue secuestrada. Lo que más me pareció interesante de la obra fue la presencia de los espejos. Los espejos pueden ser interpretados de varias maneras. Al final la obra nos dice que se deben usar espejos y que el espectador se debe ver a sí mismo en los espejos. Creo que esto es altamente simbólico a varios niveles y tiene una función crítica en el entendimiento de la obra. Por un lado los espejos invitan al espectador a pensar en un cambio de roles. ¿Qué pasaría si serian Paulina o Gerardo en un evento como el que presenta la obra? También creo que invita al espectador a preguntarse sobre Miranda y su involucramiento como doctor en las torturas. ¿Se debe perdonar Miranda o simplemente estaba siguiendo órdenes? Esto es un tema que me recuerda mucho a Eichmann in Jerusalem de Hannah Arendt. También creo que los espejos están intentando decir que aunque esta es una obra de ficción, está completamente atado con ocurrencias verdaderas. El espectador se ve a sí mismo en los espejos y reconoce que es una historia sobre humanidad, sobre política, y gobiernos que son entes humanos. Los espejos están allí para que el espectador no se olvide que todos debemos pensar sobre moralidad y ética que se presentan en casos como el de Paulina y muchas personas más. El hecho es que hubo miles de desaparecidos y torturados directamente e indirectamente durante dictaduras en latino américa. Creo que el uso de los espejos en el final de la obra fue una gran manera de que no solo sea una obra literaria si no que haga que el espectador reflexione sobre acontecimientos reales. Creo que los espejos están diciendo que Paulina pudo haber sido cualquiera de nosotros en otras circunstancias.