Monthly Archives: September 2015

Hola a todos!

Un saludo a todos de SPAN 405 ????
Con retraso, pero llegué…Me llamo Ursula y estoy en mi ultimo año en la UBC. Estoy terminando mi grado en relaciones internacionales con un “minor” en español. Durante mi estancia aquí, he tenido la oportunidad de estudiar mucha literatura y cultura latinoamericana y española. El año pasado fui de intercambio a Granada, España y allí llegué a conocer muy bien la cultura andaluza. Volví a Canada con ganas de conocer más. Por eso sobre todo estoy encantada de entrar en esta clase y seguir mi aprendizaje.

Hola a todos!

Me llamo Emma. Soy de China y hace cinco años que vivo en Vancouver con mi familia. Estudio español y comercio en UBC. Tengo un hermano y una hermana mayor. Mi hermano trabaja en China y le gustaría visitarnos cuando está de vacaciones. A mí me encanta viajar y este verano he estado en España para intercambio, pero solo estuve allí por dos meses. Además, prefiero ir al gimnasio con mis amigos y hacer yoga con mi hermana en el fin de semana. Me gustaría aprender la historia de España y Latina América, pero creo que es un poco difícil entenderla para mi.

Hola a todos!

Me llamo Emma. Soy de China y hace cinco años que vivo en Vancouver con mi familia. Estudio español y comercio en UBC. Tengo un hermano y una hermana mayor. Mi hermano trabaja en China y le gustaría visitarnos cuando está de vacaciones. A mí me encanta viajar y este verano he estado en España para intercambio, pero solo estuve allí por dos meses. Además, prefiero ir al gimnasio con mis amigos y hacer yoga con mi hermana en el fin de semana. Me gustaría aprender la historia de España y Latina América, pero creo que es un poco difícil entenderla para mi.

La cabeza del cordero

En la lectura, La cabeza del cordero, el autor, Francisco Ayala, no soló cuenta un relato respecto a la Guerra Civil Española, sino también analiza el corazón humano a través del uso de narración. La lectura se relaciona con las personas que habían participado en las guerras y también se permite los lectores a conocer más sobre ellas.

Lo que me gusta mucho sobre la lectura es el uso de palabras del autor y la claridad del lenguaje. Las descripciones de la ciudad, Fez, son muy vívidas que establecieron los imagenes en mi cabeza. Los retratos detallado de los caracteres nos ayudan crear cada personajes. También, a través de la voz de la protagonista, José Torres, nosotros, los lectores, podemos interpretar el sentimiento de estar en un país donde no conocía a nadie y el ganas de explorar la ciudad hermosa. Además, me parece interesante cuando hay preguntas que se hice a sí mismo José. Por ejemplo, ¨¿ De parientes míos? ¡Qué disparate! Aquello tenía que ser, por supuesto, una equivocación. Yo no conocía a nadie en Fez, ni jamás antes de esta oportunidad había estado en Marruecos¨ (p. 186). Esas preguntas me traen curiosidad y hacerme sentir de la misma manera y tener dudas como lo hace José. 

El título de la lectura me llama la atención y yo no entendía lo que significa hasta que terminé de leer. En mi opinión, la cabeza del cordero simboliza los hombre de la guerra que ya están todos muertos. Esto le causa la indigestión al protagonista que sentí en el estómago, significado que esto se relaciona con su sangre y su parentesco. La cabeza del cordero no soló refiere a la cena que le invita la familia mora a José, sino que representa un rechazo de él a su propia sangre. ¨tuvo por lo pronto rl poder de suscitar en mí una curiosa y repentina sensación de náusea, un movimiento de las entrañas por escapar de mí mismo, huir de mi figura y encarnación¨(p. 204). 

En conclusión, ¨La cabeza del cordero¨ analiza las condiciones de la familia que había participado en la guerra y expresa el sentimiento de la próxima generación de la familia. 

La cabeza del cordero

En la lectura, La cabeza del cordero, el autor, Francisco Ayala, no soló cuenta un relato respecto a la Guerra Civil Española, sino también analiza el corazón humano a través del uso de narración. La lectura se relaciona con las personas que habían participado en las guerras y también se permite los lectores a conocer más sobre ellas.

Lo que me gusta mucho sobre la lectura es el uso de palabras del autor y la claridad del lenguaje. Las descripciones de la ciudad, Fez, son muy vívidas que establecieron los imagenes en mi cabeza. Los retratos detallado de los caracteres nos ayudan crear cada personajes. También, a través de la voz de la protagonista, José Torres, nosotros, los lectores, podemos interpretar el sentimiento de estar en un país donde no conocía a nadie y el ganas de explorar la ciudad hermosa. Además, me parece interesante cuando hay preguntas que se hice a sí mismo José. Por ejemplo, ¨¿ De parientes míos? ¡Qué disparate! Aquello tenía que ser, por supuesto, una equivocación. Yo no conocía a nadie en Fez, ni jamás antes de esta oportunidad había estado en Marruecos¨ (p. 186). Esas preguntas me traen curiosidad y hacerme sentir de la misma manera y tener dudas como lo hace José. 

El título de la lectura me llama la atención y yo no entendía lo que significa hasta que terminé de leer. En mi opinión, la cabeza del cordero simboliza los hombre de la guerra que ya están todos muertos. Esto le causa la indigestión al protagonista que sentí en el estómago, significado que esto se relaciona con su sangre y su parentesco. La cabeza del cordero no soló refiere a la cena que le invita la familia mora a José, sino que representa un rechazo de él a su propia sangre. ¨tuvo por lo pronto rl poder de suscitar en mí una curiosa y repentina sensación de náusea, un movimiento de las entrañas por escapar de mí mismo, huir de mi figura y encarnación¨(p. 204). 

En conclusión, ¨La cabeza del cordero¨ analiza las condiciones de la familia que había participado en la guerra y expresa el sentimiento de la próxima generación de la familia. 

La cabeza del cordero

Para mí, los temas que más me llamaron la atención de este texto fueron 1) la identidad, 2) los lazos familiares y la memoria, y 3) el impacto de la guerra en la psique personal y colectiva.

1. Comenzando por el tema de la identidad: al ver sus familiares marroquí por la primera vez, José Torres guarda su distancia. Se considera distinto y se mantiene separado de estos “moros” que afirman ser su familia. Él es español, de Almuñecar, y ellos son marroquí; es decir, “árabes” – dos etnias e realidades distintas. Pero al observarlos más abiertamente, se da cuenta que existe una semejanza innegable entre él, los parientes de su lado de la familia y esta gente, y poco a poco empieza a identificarse con ellos.

2. Lo que abre las puertas al reconocimiento del lazo familiar es la memoria. La imagen de Yusuf y su madre le despiertan recuerdos a José de sus propios tíos: “el parecido era tan intenso que, en lugar de haber servido para ofrecerme una apacible confirmación de nuestro supuesto parentesco con aquellos moros, me llevó de golpe, pasando por encima de ellos, a la presencia de mi tío, a quien tantos años hacía que no había visto…pues me separaban de él, no sólo el océano, sino también mares de sangre” (199).

3. Lo que más les une son los recuerdos de la guerra, grabados en la memoria como los ecos de una pesadilla compartida. Cuando “la señora” Torres le pregunta “qué había sido de la suerte de los Torres allá”, se desbordan las memorias de su tío Jesús, “muerto, con un tiro en la nuca, junto a otros muchos cadáveres alineados en el suelo cual mercancía de feria…” (205). Cuando Yusuf y José visitan el cementerio, intercambian historias sobre sus familiares y sus vivencias en la guerra. Aunque son mayormente recuerdos negativos, el compartir de sus historias les une en un mismo pasado familiar.

A pesar de la reunión con su familia marroquí, el encuentro con sus parientes en Fez también le causa a José una gran indigestión, representado por la cabeza del cordero. Yo interpreto la cabeza del cordero como un símbolo de sus recuerdos de la guerra que el encuentro le despierten en él. No puede dormir, no puedo dejar de pensar, y no puedo digerir, es decir, procesar, el gran dolor de barriga que la imagen de la cabeza del cordero le provocó: “que aquel peso insoportable, aquí, en el estomago, era nada menos que la cabeza del cordero, la cabeza, sí, con sus dientecitos blancos y el ojo vaciado” (229). Para José, el re-encuentro con sus familiares le hace recordar de las pesadillas olvidadas de la guerra y las cicatrices grabadas en sus recuerdos de sus antepasados.

Semana 1: La Cabeza del Cordero

Este libro me interesó mucho porque se relaciona con una parte de la historia de mi familia. Durante la guerra civil en España, mi bisabuelo (y mi abuelo que tenia solamente 5 años) tenia que escapar a Argentina dado la posición política de mi bisabuelo, quien era un partidario del movimiento de autonomía en Galicia. Lamentablemente, no he podido terminar el libro debido a un mal caso del gripe, pero he podido observar y analizar algunos puntos de la literatura que me hizo reflexionar y pensar.

Primeramente, una cosa que me impresionó durante la obra es la claridad del lenguaje y la prosa rica que usa el autor para la narración, especialmente en las descripciones de la ciudad de Fez y el protagonista José Torres. Además, en sus narraciones sentí una presencia constante de la angustia como un tema que entrelaza estos relatos durante la Guerra Civil y los protagonistas, atrapados en el horror y la tragedia que viene con la guerra.

En la primera parte, “El mensaje”, podemos ver las tensiones entre los primos en un ambiente rural antes de la guerra, enfocándonos la personalidad del narrador que se hace humano a través de las palabras de Ayala. En mi opinión, el efecto que tiene en humanizar a sus personajes es que nos muestra el lado personal de las víctimas de la guerra, y que la perdida y dolor es un hecho que ocurrió con muchas familias – la guerra es una tragedia humana universal.

El segunda relato, “El tajo” se sitúa en la guerra civil. Mi personaje favorito era el general Santolalla, que forma parte del ejército nacional. A través de la historia, el autor nos muestra sus circunstancias y miedos – su lado humano, incluyendo la reflexión de su vida, iniciado por el asesinato de un miliciano joven. Por tanto, yo creo que el verdadero conflicto ocurrió en la conciencia de las protagonistas. Recorriendo los momentos de miedo y violencia de su historia personal, el general, pese a la victoria de su ejercito, no festeja su éxito, sino estaba abrumado con una sensación de vacío que dejan los remordimientos de la guerra.

Mi paso favorito de El Tajo:

“Lo había asesinado, sencillamente .. Cuando eso era obra ajena, a él lo dejaba perplejo, estupefacto, lo dejaba agarrotado de indignación; siendo propia, todavía encontraba disculpas, y se decía «en todo caso, era un enemigo…» Era un pobre chico -eso es lo que era-, tal vez un simple recluta que andaba por ahí casualmente […] «he asesinado a un semejante, a un hombre ni mejor ni peor que yo.»

En mi opinión, una palabra que representa este libro es “angustia”. En conclusión, más allá de un mensaje político, yo creo que la condición humana es también una tema principal, sobre lo que reflexiona en un tiempo de guerra (donde vemos los lados oscuros y virtuosos de los seres humanos), una situación donde todo se escala. Las reflexiones sobre la conciencia estaban presentes en prácticamente toda la obra. Tambien estaba el “vacío”, una sensación que acompaña todos los personajes, con el mensaje melancólico la falta de absolución por los actos inhumanos cometidos durante la guerra. Es la incomprensión ante unos hechos que golpean la vida humana y sitúa a nuestra conciencia, con el conocimiento que solo nosotros somos dueños de nuestros propios actos, y en fin, tenemos que tomar la responsabilidad.