Una de las cosas que siempre hago cuando lea algo de un escritor del que nunca he oído hablar es hacer una investigación rápida y superficialmente para averiguar quién es y cómo esto se refleja en su trabajo el que estoy a punto de leer. Clorinda Matto de Turner era una persona bastante interesante. Al parecer sus obras eran tantas controvertidas en el momento en el que fueron escritas que el arzobispo la excomulgó. Fue después de leer esto que mi interés se despertó. Además, Matto de Turner fue una autora mujer en a finales del siglo XIX, ¡por no hablar del hecho que escribió sobre temas controvertidos! Realmente, me gusta esta novela como si fuera una deliciosa comida; mi único pesar sin embargo, es que no tuve tiempo de disfrutar y digerir todo, para saborear cada bocado jugoso de los giros sórdidos de la trama y los conflictos de moralidad.
Para mí, la parte más importante del libro, el cual llevaba conmigo a través de la duración, ocurre en la página 40, cuando el labrador camina por la ciudad. El narrador comparte su cuestionamiento: “¿[e]ran el temor o la duda, el amor o la esperanza, lo que agitaban su alma en aquellos momentos?” Tal vez este sea una frase deslumbrante y común en español, pero como gringo, me pareció extraño: el miedo y la duda son emociones comunes que todos sentimos, igual que el amor y la esperanza. Pero aquí, Matto de Turner posiciona estas emociones juntas y opuestas unas de otras. El amor puede causarnos temor, duda y esperanza; el miedo puede hacernos dudar, esperanza y mucho amor; duda procede a menudo de miedo, a menudo desde el amor y es lo contrario de la esperanza; y la esperanza parece ser la fuerza de los tres.
Este conflicto entre el temor, la duda, el amor y la esperanza se sostiene a lo largo de la narrativa. El miedo se evoca en Juan y Marcela basándose en las deudas que han adquirido de la iglesia y del gobierno local y el castigo que enfrentarán si no se les paga: el miedo a perder a su hija que es cogida para ser vendida como esclava. También se evoca en Lucía cuando ve el horrible trato de las indígenas de la iglesia, del gobierno y de los ciudadanos—la comunidad de la que ella es parte—que trata a una comunidad marginada a la que es empática. El cura y los funcionarios del gobierno tienen el miedo a ser atrapados por su mal comportamiento y sus acciones. El miedo siembra la semilla de la duda, tanto es así que la Lucía y Fernando escapan de vuelta a la ciudad; el cura huye de la escena del caos que creó; ¿Duda él su papel en la calamita que se desarrolló? ¿La representación de Matto de Turner de la injusticia social — la duda y miedo de y hacia el marginado — inspiran al lector a amar y esperar?